Las recientes declaraciones del portavoz socialista en el Senado y secretario de organización del PSOE, son inquietantes, muy inquietantes para los pocos ciudadanos y ciudadanas que han vuelto a confiar en esta formación política. Decía D. Marcelino; “El PSOE va a ejercer una oposición responsable, no vamos hacer lo que hizo el PP cuanto peor mejor”.
Decía inquietantes, porque surge una pregunta: ¿Va apoyar el PSOE que los populares desmantelen la Sanidad, la educación y todos los servicios sociales, las ayudas a los parados sin prestaciones, ayudas domiciliarias y que no pongan en marcha la Ley de Dependencia, como están haciendo en las Comunidades donde Gobiernan?
Siempre se ha dicho en España que las elecciones no se ganan, se pierden, tengo la impresión muy personal que los socialistas no desean reconquistar el Gobierno o bien la mayoría de sus dirigentes se han equivocado de Partido, o lo peor no saben los ideales que representa ser socialista y se han aburguesado. Pablo Iglesias fundó el Partido Socialista y conquistó el título de defensor del movimiento Obrero Español.
Aunque nos hayamos creído que nuestros país solo existe clase media, empezamos a darnos cuenta de que las casas y pisos que conseguimos comprar trabajando en Francia, Alemania y Suiza (y por las que los especuladores nos hicieron creer ser millonarios), ahora no se venden y volvemos a la realidad: España es un país de Obreros, Pensionistas y en la actualidad de parados.
Han surgido en las redes sociales, grupos de militantes socialistas que cada vez se hacen más grandes y reivindicativos, con nombres muy sugerentes “La rebelión de las bases” y un largo etc., todas ellas desean una oposición clara en defensa de los trabajadores, pensionistas y parados, algo que deberían saber todos los socialistas electos, los españoles no les han votado ni para apoyar al PP y ni mucho menos para apoyar los recortes haciéndoles pagar los costes de la crisis a quienes no la han provocado.
En mi opinión, la mayoría de los militantes de base socialistas, solo esperan los resultados del próximo Congreso Federal, y no sería muy arriesgado decir que si en el Congreso se le corta la voz a la militancia terminaránn quedándose solos los mal llamados barones del Partido, ya que cada vez tienen menos puestos de confianza para distribuir entre sus limpiachaquetas, y ahora solo valdrán los razonamientos políticos y recuperar la ideología que parecen haber perdido los actuales dirigentes del PSOE.