Emilio OlÃas Ruiz (Madrid, 1958) es Catedrático de TecnologÃa Electrónica en la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M). Su investigación se centra en los sistemas solares fotovoltaicos. Autor de más de cien artÃculos publicados en congresos y revistas internacionales, es miembro de la International Solar Energy Society (ISES). El próximo 28 de mayo interviene en el foro UNI-CIENCIA en CaixaForum Madrid en una mesa redonda sobre la innovación verde y la energÃa del futuro.
UNI-CIENCIA trata de acercar el trabajo del investigador de la universidad a la ciudadanÃa. ¿Qué cree que puede aportar  la universidad a la sociedad?
La universidad aporta fundamentalmente el valor añadido de su personal, formado con niveles muy altos y con experiencia en comunicación cientÃfica. Los universitarios utilizamos, en la medida de lo posible, un lenguaje cercano y motivador, buscando despertar o mantener bien despierto el interés por las noticias cientÃficas.
¿Cree que en general se valora el conocimiento que tiene el investigador y lo que puede aportar a la sociedad?
Cada vez se valora más, aunque es necesario realizar un ejercicio de aproximación aún mayor entre investigadores y el resto del mundo. La realización de proyectos en común es una de las claves de estas mejores relaciones, puesto que se comparten responsabilidades y las dos partes –investigador y sociedad– pueden satisfacer juntos y con mayores probabilidades de éxito objetivos realizables. Esto puede servir bien para mejorar una situación previa, bien para la publicación de los trabajos en revistas internacionales, con beneficios tangibles para ambas partes.
La mesa en la que participa orbita en torno a la innovación en el sector de la energÃa. ¿Qué percepción cree que tiene la sociedad sobre estos temas?
La palabra ‘energÃa’ ya forma parte del vocabulario cotidiano de los ciudadanos. Y hay una gran sensibilidad social en torno a este asunto, porque si hablamos de energÃa, entramos en contacto con el medio ambiente, la sostenibilidad, los recursos naturales, los recursos fósiles y los renovables, el tratamiento de los residuos y otros temas, todos ello de actualidad. Su recogida en los medios de comunicación resulta muy positiva, pues ayuda a generar estados de opinión, a partir de informaciones contrastables y veraces.
¿Qué influencia tienen las nuevas tecnologÃas en el área de la energÃa?
Las nuevas tecnologÃas impregnan todos los procesos relacionados con la energÃa, como si fueran agua de lluvia que se extiende por todas partes. Las gestiones de los flujos energéticos y la correlación entre oferta y demanda, que debe hacerse con precisión para mantener una productividad adecuada en el sector y una competitividad alta, requieren utilizaciones masivas de nuevas tecnologÃas.
¿Es eficiente nuestro modelo energético?
Esta es una muy buena pregunta. La primera tentación es responder que no, puesto que, si nos estamos refiriendo a España, somos un paÃs con gran dependencia energética del exterior, con pocos recursos naturales (carbón, escaso y de no muy buena calidad; importamos gas; importamos petróleo, importamos combustible nuclear). Sin embargo, si pensamos en el dÃa a dÃa, la respuesta podrÃa ser que sÃ, porque España es un paÃs que tiene una posición geográfica muy buena. Con un número de horas de sol medio al año importante, con buenas caracterÃsticas de viento en determinadas zonas. Además, habrÃa que tener en cuenta para responder adecuadamente, el efecto de la crisis general sobre el tema energético, que nos debe hacer reflexionar sobre la situación actual. España tiene potencia instalada para producir el doble de electricidad de la que en estos precisos dÃas se demanda. Y esto supone otro elemento importante de reflexión, que debiera tenerse en cuenta.
¿Qué protagonismo tienen las energÃas alternativas y hasta qué punto son rentables?
En todos los paÃses BRICK [en economÃa internacional se utiliza este término para referirse a Brasil, Rusia, India y China, paÃses que tienen una gran población, enorme territorio y gran crecimiento económico y comercio internacional] las energÃas alternativas no están en cuestión. Con diferentes estrategias, se está apostando en unos casos por biocombustibles (Brasil, con los alcoholes derivados de la caña de azúcar), la energÃa eólica (China es un buen ejemplo), sin olvidar la energÃa solar, a partir de las centrales termosolares o las centrales fotovoltaicas. No todas las soluciones son igualmente aplicables. Los esfuerzos en energÃas alternativas que se están haciendo tienden a una bajada de sus costes, mientras que los costes de las tecnologÃas basadas en combustibles fósiles se disparan dÃa a dÃa. Europa sigue siendo referente mundial en el uso de la energÃa solar fotovoltaica (Alemania) y España se encuentra en una situación de transición, consecuencia de la aplicación quizás excesiva de tarifas muy subvencionadas para las energÃas renovables, que se están tratando de controlar para que no repercuta excesivamente en el déficit de la tarifa eléctrica, sin olvidar el potencial que, por su posición geográfica, nuestro paÃs tiene.
¿Cuál es, según su punto de vista, la energÃa del futuro?
DeberÃa contestar, sin dudarlo, que el futuro de la energÃa pasa por el uso masivo y generalizado de energÃas renovables, pero permÃtame que añada que, también el futuro de la energÃa y, por tanto, la energÃa del futuro, pasan por una mayor educación en consumo energético, que contemple aspectos relacionados con el medio ambiente y la sostenibilidad. El ahorro energético es fundamental. El consumo responsable también. Un concepto nuevo empieza a utilizarse: autoconsumo. Se tratarÃa de que el consumidor pudiera ser también productor de al menos parte de la energÃa.
¿Dónde se puede educar en estos aspectos?Â
No hace falta llegar a la universidad para conocer los conceptos de ahorro y eficiencia energética, que debieran formar parte de nuestra educación más temprana. Somos un paÃs con gran dependencia energética exterior y debemos concienciarnos de que puede no ser sostenible el nivel de consumo energético que tenemos actualmente, si no mejoramos en eficiencia y en un mayor y mejor uso de las energÃas renovables.
¿Qué dos o tres medidas se podrÃan adoptar para mejorar la eficiencia energética?
La certificación energética de edificios serÃa una medida que, de generalizarse, podrÃa suponer un avance importante. La incentivación y ayuda a quienes proponen mejores soluciones energéticamente más eficientes también (los planes Renove, en general). Y un estÃmulo para fomentar el autoconsumo permitirÃa un mayor control sobre la energÃa que se produce y nadie consume.
UC3M / SINC