El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Nuñez Feijóo, ha decretado que todos los parados de larga duración quedarán sin cobertura sanitaria. Todos aquellos que residan en la Comunidad Gallega y que lleven parados más de un año se verán desprovistos de su tarjeta sanitaria y dejarán de tener médico de cabecera y no tendrán recetas médicas. Estos serán atendidos en los servicios de Urgencias tras firmar “un compromiso de pago”. Idénticas medidas se van a aplicar en la Región de Murcia, donde su presidente, Ramón Luis Valcárcel, del Partido Popular al igual que Nuñez Feijóo, ha tomado las mismas medidas.
Resulta francamente lamentable que en haya ciudadanos españoles que residiendo en su propio país sean considerados y tratados como inmigrantes sin papeles. Cuando estamos asistiendo a la consumación de la pujanza y opíparo desarrollo de reales negocios, creo que no es necesario que lo exponga más claramente, observamos con infinito asombro como son tratados los españoles que han tenido la desgracia de perder su trabajo y en miles de casos sus bienes y se ven abocados a la miseria y al más cruel de los abandonos por parte de las administraciones regidas por individuos a los que no se les cae la cara de vergÁ¼enza por cobrar lo que cobran, en la mayoría de los casos de forma totalmente inmerecida y que osan entrometerse en la vida de personas cuyo único daño o delito cometido ha sido el de entrar en el mundo de la pobreza sin ellos pretenderlo y sin motivo alguno que les pueda culpabilizar por ello.
Cuando vemos como se indulta a banqueros en vez de penalizarlos por su mala gestión, mientras contemplamos como estos se asignan sueldos y jubilaciones de verdadero escándalo y que suponen un insulto para el resto de la sociedad española, mientras muchos bancos dirigidos por ellos se han ido al garete o van a la deriva y a punto de estrellarse contra los arrecifes, mientras observamos atónitos este tipo de actitudes, vemos como se ha tenido que movilizar la sociedad española para intentar recoger entre todos unas cuantas, muchísimas, toneladas de tapones de plástico para poder costear los gastos de una operación quirúrgica a esa niña llamada Aitana para poder salvar su vida siendo el costo de la intervención de 200.000 euros. Mientras todo esto ocurre vemos como los dirigentes políticos se ensañan con los pobres, con los desafortunados, con aquellos con los que más se ha cebado la crisis para darles el puntillazo definitivo y para que se den cuenta de lo cruel y triste que es el ser pobres, como si no lo tuvieran ya más que constatado.
Pero por lo visto el sistema es este y no hay otro, digo yo a la vista de lo que está sucediendo. Estos dos barones del Partido Popular, Nuñez Feijóo y Valcárcel, son la avanzadilla de la “marabunta” que se nos viene encima a los españoles cuando Rajoy comience a gobernar. Esto es un aviso para navegantes o para aquellos “toreros”, los ciudadanos, que tienen que lidiar la crisis todos y cada uno de los días desde su amanecida hasta que se vayan a la cama, los que aún la tengan bajo techo. Todos esos que están sufriendo esta situación y los que sin duda alguna van a formar parte de esos sufridores por la mala gestión de los gobernantes y de los que manejan el dinero. La gran tragedia de muchos de esos que han pasado a ser españoles sin papeles en su propio país es muy posible, seguro, que habrán votado al Partido Popular esperando que esa promesa de Rajoy de darles un mundo mejor se haga efectiva, pero se van a encontrar con aquellas versos de Zorrilla que en su obra don Juan Tenorio, rezan así: “No os podéis quejar de mi. Aquellos a quien maté. Si buena vida os quité, mejor sepultura os di”.
Esto es la materialización de la oferta electoral de Rajoy, aunque cierto es que no hizo ninguna durante la campaña, pero es innegable que la estafa y la falsedad de sus virtuales propuestas se hará visible para todos los españoles a no mucho tardar.