EL CRISOL – Pascual Mogica Costa
¿Qué está pasando? El pasado 8 de octubre el ex concejal del Partido Popular en el ayuntamiento de Majadahonda, José Luís Peña, que fue quien denunció el caso GÁ¼rtel, declaraba, en una entrevista publicada en el periódico El Plural, que había temido por su vida y que había pasado miedo a raíz de su denuncia. Esto lo rarificaba en una entrevista que se le hizo en el programa La Noria de Tele5, donde dijo que tuvo que destruir una de las grabaciones que hizo porque en ella se decían cosas muy duras. A pregunta de uno de los periodistas sobre si en esa grabación que había destruido se planteaba el producir algún daño físico a alguien, el ex concejal no respondió con un sí pero la contestación que dio venía a dar una respuesta afirmativa a la pregunta.
El pasado día cuatro, el diario Información de Alicante, publicaba unas declaraciones del número dos de Gallardón, Manuel Cobo, que como se sabe mantuvo una fuerte polémica, una dura lucha sería lo más descriptivo, por el asunto de la presidencia de Caja Madrid y por lo cual hizo una fuerte crítica a Esperanza Aguirre en El País, en esas manifestaciones Manuel Cobo, dijo que cuando se destapó el caso de las escuchas, espionaje, dentro del propio PP, “temió por él y por sus hijos” .
Ahora, más recientemente no encontramos que como consecuencia del asesinato del que fuera alcalde de Polop de la Marina (Alicante) Alejando Ponsoda, del Partido Popular, se han producido varias detenciones y entre ellas la del actual alcalde Juan Cano, que sustituyó al asesinado. En la información dada por la prensa (Diario Información 25-11-09) se dice que “el fallecido mantuvo continuos choques con el arrestado por frenar presuntos pelotazos urbanísticos” El mismo periódico da cuenta de que el detenido “fue apeado de las listas en 2003 por una presunta comisión ilegal y rescatado por los campistas (los seguidores de Francisco Camps) en 2007”.
¿Qué está pasando? Hay gente que teme por su vida y por la de su familia a raíz de producirse peleas internas, hay detenidos como consecuencia de las investigaciones que la policía está llevando a cabo por el asesinato de un alcalde. Esto es muy serio y muy preocupante, muy posiblemente se estén dando este tipo de situaciones, graves todas ellas, porque la Justicia no ha actuado en el momento preciso y con la debida diligencia. El fallo del asunto de Camps, ha sido una decisión que ha sembrado un mar de dudas y de desconfianza en muchos ciudadanos en la Justicia. Yo no entro a juzgar la decisión de los jueces en dicho asunto, pero si me queda la duda y como ciudadano libre la expongo, si intervenciones de este tipo no están fomentando escándalos de mayor calado al darles a algunos políticos un grado de inmunidad que ni se merecen ni su actitud y forma de actuar es la adecuada para darles el menor margen de maniobra para que puedan cometer hechos delictivos y que se produzcan tantos casos de corrupción, llegando incluso a que ya se hable de miedos, de posibles atentados contra una determinada persona y su familia y de presuntas implicaciones en asesinatos. Esto pinta muy mal.