Ya está el personal pensando en las vacaciones de semana santa que aunque no sean prolongadas parecen ser muy bien recibidas por aquellos que todavÃa pueden disfrutar de ellas ,que tal y como están las cosas supongo que serán menos que el año pasado ,mientras ya tenemos nuevo gobierno ,que no parece contentar a nadie pero ahà esta no sé si aguantara los cuatro años de legislatura o no ,de momento ,parece que la maquinaria a de volver a ponerse en marcha ,lo que creo que llevara algún tiempo hasta que todo vuelva a su lugar ,supongo que este tipo de cambios no se notaran en la calle ,ni mucho menos van a sacarnos de la coyuntura actual que no se resuelve con un cambio de caras ,mas bien con ideas pero me parece que los nuevos no traen ideas de ningún tipo, se quedaran para ser sumisos a su jefe a pesar de que este no es quien les paga.
El común de los mortales ve esto como un mero espectáculo con el que se llenan horas de radio, tv y periódicos ,pero su realidad es sobrevivir y procura huir a algún lugar si su economÃa se lo permite ,viajar sirve para cambiar de ambiente y regresar con las neuronas relajadas.
Mi masoquismo no tiene lÃmites, el nuevo gobierno me tiene impactado porque eso de que Pepe Blanco sea ministro me tiene fascinado todo un prodigio de ecuanimidad, buen carácter y grandes móldales, me temo que van a ser muchas las tardes de gloria con sus intervenciones, negado el pal y la sal a quienes no viven en comunidades que no comparten color con el gobierno.
Otra sorpresa ha sido la ministra de cultura, una cineasta de esas que hacen pelÃculas que casi nadie ve, asà que se supone que tendrá bien en cuenta a sus compañeros de gremio a la hora de las ayudas…
Suena a premio por apoyar a Zapatero pero va a tener cuatro años para ver que hace y como se porta con el resto de las artes que conforman la cultura que no son pocas.
Curioso que los cambios se hayan producido en momentos pre vacacionales que han pillado a más de uno con el paso cambiado.
Ahora comienzan los famosos cien dÃas de cortesÃa para los que llegan nuevos y todas esas cosas que se hacen estas ocasiones que uno no sabe si sirven de algo pero ahà están.
Supongo que cada vez que cambia algo en un ministerio hay que cambiar imprenta, papeles oficiales y demás, asà que se gasta un dinero en poner las cosas al dÃa, que para tiempos de crisis todo gasto es una locura y una idea errónea pero ya se sabe que cuando alguien llega nuevo a algún lugar quiere cambiar cosas aunque sean los muebles.
En fin tenemos nuevo gobierno, y seguro que cambian cosas aunque no lo notemos…