Mi amigo el Dr. Levi, psiquiatra en Miami, estudioso de las ciencias del comportamiento y especializado en el síndrome de Mauthausen, me decía; aquellas personas capaces de cometer crímenes horribles en su mayoría son personas que han pasado toda su vida buscando la popularidad sin conseguir traspasar las fronteras de su ámbito territorial, por eso mismo su mente enferma es capaz de pasar varios años proyectando un golpe de efecto grandioso que le dé primeras páginas en los rotativos de todo el mundo, que consiga que su imagen nunca sea olvidada por las personas de buena fe.
Nos decía en el Parlamento español una madre dolorida por la muerte de su hijo y de 190 otras personas el día más triste que vivimos los españoles, por favor no pongáis las imagines de horror cada vez que lo hacéis nos estáis haciendo revivir los peores momentos de nuestra vida.
Me decía mi amigo; cada vez que un diario importante le hace una entrevista a un asesino múltiple, él se regocija diciendo, ¡fue horrible pero era necesario! Al darse cuenta que está consiguiendo su objetivo, ser celebre se permite ahondar en el dolor. Sí la prensa y la TV solo reflejaran los hechos, sin imágenes de los culpables posiblemente conseguiríamos frenar algunos de estos sucesos.
Me quede tan apesadumbrado con las noticias que llegaban de Noruega que se me hacía imposible poner una letra detrás de otra para escribir mis opiniones; ¿En qué mundo vivimos? ¿Cómo es posible que una persona pueda comprar grandes cantidades de fertilizante y pueda encontrar en Internet fórmulas de reacciones químicas con las que poder construir aparatos destructivos?.
No sé si será posible controlar todas esas cosas que hacen de nuestro planeta un mundo donde Un tercio de su población mueren inocentemente sin saber porque