EL CRISOL – Pascual Mogica Costa
Bueno. Parece ser que la cosa esta de tenernos a todos con el corazón en un puño ya no es exclusiva de los ministros económicos, Luís de Guindos y Cristóbal Montoro, ahora el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, parece ser que no tiene mucho trabajo en su ministerio y les está echando una mano tanto a Guindos como a Montoro, pero no para ver la forma de ir solucionando el problema de la crisis, que ya no es un problema sino una rutina o letanía cotidiana, algo así como “el pan nuestro de cada día” pero sin pan.
Desde Berlín el ministro de Exteriores ha anunciado que el Gobierno presentará “en los próximos días” un “paquete de restricciones presupuestarias muy severo”. En Berlín se ha reunido con su colega alemán y con el titular de economía y como no, con los líderes de los grupos parlamentarios democristianos de la CDU y de los socialdemócratas del SPD. Hay que estar a bien con Dios y con el diablo. García-Margallo ha dicho que “les he explicado todas las medidas tomadas por este gobierno en sólo seis meses, que ya han dado sus frutos”. Los “frutos” serán, pienso y digo yo, el haber subido los impuestos, haber abaratado el despido, haber fijado el copago en los medicamentos, haber hecho recortes en Sanidad y Educación, haber reducido las becas y aumentado las tasas universitarias, etc., etc. Si a esto se le reconoce que “ha dado sus frutos” estos son de baja calidad y muy cercanos a los higos chumbos que si los tocas con las manos te pones perdido con esos pinchos tan molestos que les cubren.
También ha dicho el ministro que en lo que se refiere a la recapitalización de la banca española con dinero del fondo de rescate europeo que considera que se puede hacer “en cualquier momento” y ha garantizado que no caerá “en saco roto”. Puede jurarlo, seguro, seguro, que no va “a caer en saco roto” de eso ya se encargarán los banqueros. Si los ciudadanos esperamos que se les despiste o les caiga algún billete para recogerlo nosotros, lo tenemos claro.
En fin, ya todo el mundo anuncia restricciones, cualquier día de estos lo van a hacer hasta los ujieres de los distintos ministerios. No me extrañaría que puestos a ello el ministro de Cultura, José Ignacio Wert, deje la carrera de Ingeniero de Caminos en Ingeniero de Atajos ya que como es sabido los atajos son el camino más corto, y puestos a restringir… De este ministro no me extraña nada. De este y de los demás.
