Caso Bankia
Ayer se incorporaron a la pieza «de salida a bolsa» del caso Bankia 4 correos que el Banco de España ocultó cuando el juez pidió que aportasen todas sus comunicaciones.
Los conocemos tras petición expresa, al mencionarlos el testigo en su declaración el pasado septiembre y vemos de nuevo confirmada la acusación incluida en nuestra querella inicial: Art. 282 bis del código penal, publicidad engañosa en la salida a bolsa…
A pesar de tener la opinión del inspector en sentido contrario, el Banco de España autorizó la salida a bolsa.
4 correos dirigidos por el inspector del BdE José Antonio Casaus a sus superiores tras cuya lectura es muy difícil seguir afirmando, como hizo Pedro Comín, destinatario de uno de los correos que declaró como testigo en julio, que la salida a bolsa fue correcta y que existían las provisiones que indicaba su folleto de salida.
Salida a Bolsa de Bankia
Casaus advertía de forma muy clara desde su primer correo el 8 de abril de 2011, que la salida a bolsa no era viable y que causaría perjuicio al contribuyente, con mención especial a preferentistas.
La operación es un primer paso para nacionalizar las pérdidas, repite, algo injusto y contrario a la norma.
Casaus nos adelanta que la operación tendrá un coste para todos nosotros de 15.000 millones de euros que, como bien sabemos, han acabado convirtiéndose en 24.000 millones.
En los correos, el inspector alerta sobre la debilidad de Bankia y el perfil marcadamente político de sus gestores sobre los, al sugerir una solución para la salida a bolsa que considera imposible, afirma: “otra cosa es que los políticos que gestionan Bankia no quieran explorar esa vía para no perder sus poltronas ni su herramienta de financiación”.
