Desde que en 2008 Manuel Hernández destituye al gerente de FAIM y comienza él a tomar las decisiones dentro de la Fundación Rey Ardid, las apariciones en prensa de esa fundación, y del Centro de Menores de Juslibol han llevado una evolución muy curiosa, muy lejos de lo que su gerente debía esperar y es que cuando la prepotencia y el mal trato a los medios es la tónica general, lo único que se consigue es que salgan a la luz temas que dañan a quien no respeta.
Y es que este señor debía pensar que adelantar el concurso de la gestión antes de las elecciones y despedir a trabajadores era pan comido. Pero no. No, amigo, no. Y es que si te llaman de un medio de comunicación, lo menos que puedes hacer es atenderle. Máxime cuando lo que se está jugando es con el futuro de unos profesionales y con unas personas, los internos, que aunque estén cumpliendo condena, son personas, no meros elementos para ganar dinero. Y cuando se critica a las personas gratuitamente, como es el caso de Manuel Hernández, que critica a sus trabajadores alegando, en la radio autonómica aragonesa -que casualidad-, que los trabajadores del CEIMJ de Juslibol «están ocupados en otros menesteres, para que luego digan que les importa el proyecto«.
¿Por qué a la radio del gobierno de Aragón sí que acude y yo tuve que llamarle varias veces para que me atendiera, escuetamente y sólo por teléfono? ¿Será por el servilismo de ese medio? No lo sé. Ni quiero saberlo, hasta que no cambien las cosas, no quiero saber nada que ocurra en María Zambrano, 2. Y es que desde la salida de José Luis Campos de esa casa, nada ha ido bien. Pero esto no es lo que nos atañe, sino la evolución de la repercusión en los medios de esta fundación desde que anunciaron el despido masivo de trabajadores.
Y es que, si por un lado está Manuel Hernández y sus malos modales, en el extremo opuesto están los trabajadores los cuales, a la primera llamada me convocaron en un bar de la Magdalena. En el Entalto. A tomar un café y a explicar, de primera mano lo que ocurre en el Centro de Menores de Juslibol. Y que así es como se hacen las cosas. Quedando, dando la cara y reivindicando que, además de su trabajo, lo que está en juego es el futuro de una serie de personas que tienen que pasar por un centro de reforma para ser rehabilitados para la sociedad. Cuando quedamos, esperaba ver a un grupo de carceleros, pero muy al contrario, apareció un grupo de jóvenes sonrientes que no dejaron de hablar del proyecto ese al que se refería el Sr. Hernández y de la importancia de la educación en un centro de reforma. En ningún momento apareció en la conversación una mala palabra hacia los internos, muy al contrario, comentaron que muchas veces, después de salir, los propios educadores quedaban con ellos para ver la evolución de esas personas fuera del centro. Ya lo comenté en su momento:
Los trabajadores del centro son quienes se han preocupado por hacer actividades deportivas, consiguiendo tener un equipo de fútbol en regional que, curiosamente, o no tanto, ha ganado durante tres años seguidos el premio a la deportividad de la liga. También los trabajadores del centro, los mismos a los que quieren despedir, se han preocupado por desarrollar, durante su tiempo libre, en esas horas que podrían haber estado con sus familias, parejas o desarrollando sus aficiones personales, una serie de actividades que canalicen la energía de los internos en hobbies positivos una vez que hayan salido del centro, como son un taller de circo, otro de teatro, otro de cortometrajes, arte terapia, habilidades sociales, horticultura… También son esos mismos trabajadores quienes, fuera de horario y robándoles horas a otros menesteres, se preocupan por hacer un seguimiento de los internos una vez que han salido del centro, para comprobar que la reinserción se desarrolla correctamente.
Y es que parece que lo que aquí se enfrentan son dos cosmovisiones distintas de la vida, por un lado, los que parece que tienen prisa por renovar contratos y conseguir subvenciones antes de que el PSOE salga del Gobierno de Aragón y, por otro, un grupo de personas que les preocupa su trabajo y las implicaciones que tiene ese esfuerzo en la sociedad. Gente de corbata frente a gente de vaqueros y zapatillas. Gente que no quiere informar ni aclarar un tema que está en las calles frente a gente que se desvive por hacerlo. Gente que se esconde frente a gente que, al mal tiempo, pone buena cara. Gente que manda un dossier de prensa que parece lo ha redactado un párvulo frente a gente que cada duda, cada llamada, cada correo, lo responden con celeridad y aportando datos fehacientes o referencias a las fuentes.
Y esto lo que ha hecho es que, tanto la sociedad como la prensa, empaticemos con uno de los dos bandos. Pero también ha conseguido que la imagen de Eva Almunia, que nunca ha sido buena, sobre todo por el despilfarro de dinero público a favor de Microsoft en lugar de usar software libre en la educación, como han hecho los políticos serios, empeore todavía más.
Y es que, además, el Partido Popular ha jugado muy bien este regalo que le ha hecho el PSOE y la Fundación Rey Ardid moviendo ficha antes de que empezaron las movilizaciones huelguísitcas, criticando Pilar Fierro, el 18 de febrero, el recorte de personal en el centro de reforma ‘San Jorge’ diez días antes del comienzo de la huelga haciendo suyas las reivindicaciones de los trabajadores.
La huelga comenzó el 28 de febrero de 2011, paro la prensa se dedicó sólo a citarlas. Es el caso de Crónica de Aragón o El periódico de Aragón. Pero consiguieron el tímido apoyo de Izquierda Unida y aparecer, por extraño que parezca, en la televisión pública aragonesa.
Más apoyos, y de mucho más peso consiguió el Manifiesto en apoyo a los trabajadores del CEIMJ Juslibol, manifiesto apoyado por Carmelo Artiaga, Luis Alegre, Ángel Orensanz, Ángel Petisme, Gervasio Sánchez…
Mientras la ciudadanía apoyaba a los trabajadores, Eva Almunia seguía atacando, por lo que tuvieron que responder públicamente a los ataques de la candidata socialista al Gobierno de Aragón.
Pero el 11 de marzo de 2011, justo el día siguiente a una movilización de los trabajadores, vuelven a cometer otro error, cuando la consejera Ana Fernández se excusa, o excusa a su partido, o excusa a la Fundación Rey Ardid, diciendo que «cree que el nuevo pliego del centro de menores de Juslibol no supone ninguna merma en la atención«. ¿Quién asesora a esta señora? ¿La misma persona que redacta las notas de prensa de la Fundación Rey Ardid?
Y es que cada aparición en la prensa tiene una increíble repercusión en las redes sociales, donde los casi 1.800 amigos del Educador Recortable en Facebook, superan de mucho los 750 amigos de Eva Almunia. Además, los amigos del Educador Recortable son una verdadera red social. Cada artículo que he escrito sobre ellos lo han enlazado unas doscientas personas en Facebook, generando un efecto vírico que hace que las reivindicaciones de los trabajados del CEIMJ se conozcan en toda Zaragoza.
Tal ha sido la repercusión de la noticia que ha llegado a la prensa nacional y ya no sólo las movilizaciones de los trabajadores, sino los vínculos del PSOE con la Fundación Rey Ardid. Como la última aparición en Libertad Digital y firmada por su redactor jefe, quienes definían que «fundaciones de un consejero de Iglesias reciben 61 millones de dinero público«.
Y es que, quien siembra vientos, recoge tempestades.