Da ya asco… verdadero asco, abrir la prensa, la radio, las televisiones y todos los medios informativos que de verdad informan de lo que tenemos encima y es desolador el ver como esa enfermedad, ese cáncer que nadie se atreve a ir extirpando, avanza y lo va invadiendo todo; anulando todo lo positivo y en definitiva y como tal cáncer (peligrosísimo que es) terminará por destruirlo todo y dejar a unas masas inertes y a las que costará lo indecible el emprender nuevos caminos para hacer algo positivo en la vida. La desaparición (o ausencia) de verdaderos gobernantes, de verdaderos estadistas, de verdaderos líderes; ha propiciado el estado actual, que si bien en mi país (España) es ya alarmante en extremo; reconozco que en muchos otros países ese cáncer avanzó ya demasiado… ¿qué ha ocurrido y que va a ocurrir? En diferentes países musulmanes, ya ha empezado la revuelta y la sangre a manchar las calles.
En españa (adrede y ya con minúsculas por lo degradado del nombre) hoy mismo cuando escribo; sigue comentándose la gran corrupción que supone la derivación de dinero público en Andalucía, para incluso jubilar a… “mineros que nunca han trabajado en una mina”; ese dinero se cuantifica en casi 700 millones de euros. En igual lugar, un presidente anterior, está involucrado en otro préstamo de favor a una empresa en la que una de sus hijas es (o fue) directivo o alto empleado y a la que le fueron entregados diez millones de euros, de los cuales otro elemento del partido (un tal Solchaga) se lleva de comisión nada menos que 460.000; habiendo infinidad de casos de diferente índole y condición que pululan por toda la región. Incluso en la ciudad donde vivo, a la actual multi empresa de Ruiz Mateos, se dice que le han adelantado nada menos que cuatro millones de euros, para una factoría, hoy en precario y que ni se sabe si va a llegar a funcionar o no, puesto que el tal Ruiz Mateos, entra en la cadena de Suspensiones de Pagos, que ahora se le de otro nombre para despistar la realidad de lo que nos tememos ocurrirá; o sea la desaparición o paralización para tiempo largo e incierto, amén de lo que puede llegar a ser otra gran estafa, de las muchas que ya ha sufrido el totalmente indefenso ahorrador español.
Esta mañana oigo en la radio que a un ex presidente autonómico (de Cantabria) un tal Ormaechea, después de haber sido condenado por delitos y confirmada cárcel por el Tribunal Supremo, sorprende que ahora y años después, le llegue un indulto y sin que se sepa haya estado ni una hora en la cárcel; el tiempo “y las aldabas”, lo arreglan todo. En Valencia, se sigue un caso de corrupción en el que involucran al presidente autonómico; el que no obstante, lo presentan (o se auto presenta) para una nueva legislatura. En Cataluña ya es inacabable la lista de corrupciones y derivaciones del dinero público, malgastado en masa en cosas absurdas y lo que ha propiciado, el que la rica región catalana, tenga hoy más deudas que “un ludópata irredento”; aún así he oído en una cadena televisiva, que han aprobado un presupuesto de casi tres millones de euros, para hacerle un “hábitat”, de una hectárea o cosa así… “a una nerviosa elefanta que padece claustrofobia”; mientras en esa región, pululan ya los hambrientos, mendigos, sin techo y muertos de hambre que van a comer a los comedores de caridad, a los que ese gobierno autonómico no aporta ni un céntimo. Aquí también se pasan por “los cojones”, lo que dice el Tribunal Supremo, e incluso señalan (marcándolos) a los niños que en la escuela, se atreven a hablar en Español, puesto que estos nuevos “demócratas hitlerianos”; no toleran otra lengua que la vernácula catalana.
El ministro de Gobernación (Interior), sigue esquivando y ocultando todo lo que puede a la oposición, que en el Parlamento, le pide cuentas sobre algo bastante obscuro, entre los que gobiernan (o dicen gobernar) y los terroristas de ETA; en lo que se intuye una connivencia criminal, puesto que si todo se aclara, son relaciones entre criminales y quienes tienen la obligación de perseguirlos y exterminarlos y no hacer convenios “hediondos”; con quienes tienen ya a su cargo casi un millar de asesinados, miles de heridos; y daños materiales que se evalúan en más de doce mil millones de euros.
Podía seguir, pero el que quiera hacerlo, simplemente que entre en la red, vea, lea y oiga, puesto que hay para años de estudio y de horror, puesto que si en la famosa obra teatral, aquel príncipe dice, que algo a podrido huele en Dinamarca… en españa es que ya no huele a podrido en casi toda ella, es que ya hiede a podredumbre hedionda y de la que está plena el tejido político y social de toda esta que antes fuera una nación, respetada y respetable en el mundo. Y prueba de que ya no lo es, es que ahora mismo le han detenido a un diplomático en Irán, este inútil gobierno pide explicaciones y no le han hecho ni puto caso y tras bastantes días del hecho.
¿Qué produce todo ello en la masa ya totalmente indefensa de súbditos españoles? Pues lo que estamos viendo, una parálisis total un ya no creer en nadie y al decir nadie entienda “NADIE”; y el que la mayoría, a lo máximo que aspire es a ingresar en esa plasta corrupta para ir devorando lo que quede, de los recursos nacionales, puesto que aquí producir… pensar en producir, emprender, hacer algo útil para el futuro, no piensa apenas nadie, puesto que han acabado hasta con las ilusiones emprendedoras del verdadero emprendedor independiente y por tanto positivo; aquí todo el mundo ha pensado y sigue pensando en que a lo que hay que ir es al dinero público, al amigo o conseguidor (a “esos Solchagas que se llevan comisiones enormes limpias de polvo y paja”) y que éste, mediante el compadreo oportuno, gestione un dinero (“a repartir”) y caiga quién caiga… españa sigue aguantando, mientras estos miserables que dicen representarnos e igualmente representar a esa españa que muere lentamente; “se parten la cara” (aparentemente puesto que sólo dicen el repulsivo… ¡“Y tú más”! y en relación a las fechorías que hunos y otros hicieron o hacen) en las modernas discusiones bizantinas, que ya sabemos el por qué se emplea esta frase, desde hace ya casi ocho siglos y que sólo sirvieron para que desapareciera el Imperio Bizantino.
El pueblo, la masa, esperando “ver el milagro” que como tal nunca va a llegar, pero pensando que todo lo que digo no les afecta… aunque les hayan congelado las pensiones (que seguro se las bajarán más adelante) auque les hagan pagar la electricidad como si fuera un lujo, igualmente la gasolina, el gas y…. “la madre que los parió”.
Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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