Nos dice el Presidente de la comunidad gallega: “A los políticos hay que censurarlos en la urnas y no acosarlos en sus casas”.
El Sr. Presidente se olvida de que la Soberanía es del Pueblo, que la delega en los políticos para que le representen y tomen las decisiones más adecuadas para defender sus intereses, creando Leyes que mejoren sus vidas.
Estas circunstancias no se dan actualmente, ya que los gobernantes están tomando decisiones que el mismo TSJ califica de ilegales. Por lo tanto, esperar cuatro años sería esperar hasta que el país y la ciudadanía estén durmiendo en las calles y comiendo de los contenedores, además de ser anticonstitucional, es injusto socialmente hablando.
Deberíamos recordar en estos momentos que Adolf Hitler llevó en Alemania al poder el Partido Nazi, con elecciones, entre 1933 y 1945, y lideró un régimen totalitario que llevó el horror toda Europa.
No, Señorías, el Pueblo debe y tiene todo el derecho a manifestarse y a controlar al Poder establecido, ya que el Poder establecido se olvida de quienes detentan la Soberanía y en su prepotencia, en vez de consultar al pueblo en las decisiones de interés general, lo critican con palabrería barata como “Quieren conseguir en la calle lo que no consiguen en las urnas”. En vez de hablar de semejantes maneras, a ver si son capaces de someter su gestión a referéndum popular…
Es más, toman decisiones contra los mayores y los minusválidos, que recuerdan bastante a las que tomaba el régimen alemán…
La ciudadanía no puede aceptar que se condene a sus mayores al abandono y a la muerte por inercia política.