De cómo democracias que sufren una metamorfosis en su composición, en su estructura y en su mecanismo devienen en “señoríos en democracia”.
“Los pañales y los políticos han de cambiarse a menudo…. por los mismos motivos”. Sir George Bernard Shaw.
“También llora el angurriento su tristeza y orfandad, tinas de llanto mugriento llenas de asquerosidad, pobre del que no ha vivido como pa diferenciar, ¿cuál es llanto cristalino y cuál es puro cangrejal”. “Como pa echarse a opinar”. José Larralde.
Particularmente en México se desarrolla un proceso social que podríamos denominar como «e
spiral de violencia», sin entrar a considerar los orígenes y protagonistas de ello en razón a la limitación del espacio de este sitio.
En el interior de la República del Paraguay la pobreza extrema, derivada de muchas causas, no encuentran un cause de resolución favorable.La geografía de la posesión del factor económico denominado “tierra” es vergonzantemente desigual. Se da también el absurdo económico del escenario del campesino sin tierra.
No negamos las concretas medidas políticas que ciertos y determinados gobiernos Latinoamericanos encaran con fervor y que son benéficas a los sectores postergados,sin embargo, anotamos que el proceso clama transformaciones más decididas y profundas, esto es un dato indiciario de la realidad.
En ciertos espacios de nuestra Latinoamérica se han generado verdaderos “señoríos en democracia” que se han constituido en fuertes compuertas a la vida respetuosa, a la disidencia, a la busqueda del bien común, a la práctica de la cooperación libre.
La vida social en estos “señoríos en democracia” se ha vuelto peliagudo para los sectores postergados porque simplemente se los mantiene en primitiva situación donde lo prioritario es procurarse la alimentación diaria. ¡ Allí están la canalla, los crápulas de la política!
La República es una caricatura, los poderes que la componen son uno sólo, son, en realidad, y como afirma el saber popular, que lo judicial y legislativo son “escribanías” del poder del “señor” ejecutivo.
Brotemos de Latinoamérica y ampliemos nuestra mirada. La consolidación de la globalidad económica no se arraiga bonitamente, no,en modo alguno. La globalización económica creó nichos de auténticas dictaduras arropadas de democracia,democracias que sufren una metamorfosis en su composición, en su estructura y en su mecanismo. Allí está Europa y su democracia en baja como prueba de cuanto señalamos.
En la eterna crisis del modelo económico global se apuntala la expoliación creciente del trabajo y de tal modo se constituye así en el principio fundamental de la economía globalizada, con todo lo que implica en medio de un escenario de falta de oportunidades de empleo, fracaso del sistema educativo , desnutrición, desalojo territorial, y represión policial. Cobijan en su íntimo a madrigueras de los crápulas.
La sociedad se ha hecho tan desigual en razón a la cada vez más desigual distribución de la riqueza producida socialmente y por cuyas causas han desatado en su interior fuerzas contradictorias cuyas implicanciones son de dificil pronóstico.
Volvemos nuestra mirada sobre México, su dolor social,sus entrañas, su pueblo,sus 43 estudiantes desaparecidos ,campesinos,obreros,productores,profesionales,educadores y muchos más, desean cambios transformadores. Buscan otra cosa.
Nuestra inquietud va dirigida entonces de manera particular al Movimiento Cooperativo Mexicano y Latinoamericano a preguntarnos en serio con las reflexiones del singular cooperativista Meyer Dubrovsky:
“Hoy más que nunca necesitamos reflexión y militancia para que nuestro movimiento rediscuta el enorme papel de responsabilidad histórica que nos toca vivir.Busquemos alternativas para detener esta avalancha neoliberal que cree que va a destruir la mente humana y hacer que nos devoremos unos a otros”.
¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!
