Según la agencia EFE, la gran Banca española multiplicó por cuatro sus beneficios en el 2013 ( Santander, BBVA, CaixaBank, Popular y Sabadell obtuvieron en 2013 un beneficio neto de 7.674 millones €), mientras la economía caía un 1,2%, se destruían 198.000 empleos y se reducían drásticamente los presupuestos de las Cajas para obras sociales, (un 60% menos desde el 2008) .Además, según una encuesta del Grupo ICSA y EADA Business School, el sueldo de los directivos subió un 7% en el 2013 mientras que el de los empleados habría caído un 0,5%, lo que repercute en un descenso de los ingresos de la renta de los hogares de un 0.8%.
De todo ello, se deduce que la Banca se habría convertido en un parásito hematófago (chinche doméstico), organismos chupópteros que no viven permanentemente sobre su hospedador o víctima sino que sólo se acercan a él para alimentarse y tras succionar hasta la última gota de sangre los abandonan exangÁ¼es y desahuciados ( según el FROB , cerca de 167.000 afectados por la venta irregular de preferentes de Bankia, NCG Banco o Catalunya Banc no podrán recuperar ni tan siquiera un pequeño porcentaje de su inversión al tiempo que se producirían 220 desahucios diarios). Estaríamos pues asistiendo a una auténtica plaga de chinches domésticos ante la que las Autoridades Sanitarias habrían recomendado a la población la adopción de medidas profilácticas como la fumigación periódica de los nichos donde se alojan dichos parásitos hematófagos en un vano intento de acabar con ellos.
La mutación de la Banca
Tradicionalmente, la finalidad de la banca era canalizar el ahorro privado hacia la inversión, pero dada la ausencia de cultura de ahorro doméstico y público, ha originado que el proveedor de recursos para dinamizar la economía en forma de inversiones se haya trasmutado en un parásito hematófago que succiona todas las ubres del Estado para saciar el apetito insaciable de sus accionistas y altos cargos directivos. La casta dirigente bancaria se habría transmutado así en una camarilla de poder (equivalente a un miniestado dentro del Estado), que utilizaría el nepotismo para perpetuarse en el poder con carácter vitalicio, recurriendo a los llamados “contratos blindados” para asegurarse un retiro dorado.
Así, los casos más sangrantes serían el del ex vicepresidente y consejero delegado del banco Santander Central Hispano (SCH),Ángel Corcóstegui quien cobró en 2002 la indemnización récord de 106 millones de euros, seguido en el ranking de la ignominia por José María Amusátegui, que recibió como “compensación a su pensión” la friolera de 43,8 millones de € . Recordar que la indemnización media de un trabajador por cuenta ajena por despido en España no alcanzaría los 8.000 €, por lo que el Gobierno de Rajoy se ha visto obligado a aplicar medidas cosméticas para penalizar los contratos blindados de los altos directivos que superen los 700.000 euros.
Por último, no dudarán en asentar sus reales en paraísos fiscales (centros offshore) para escapar a los tentáculos de la Hacienda española. Así, según el informe elaborado por el Observatorio de la Responsabilidad Social Corporativa, 33 de las 35 empresas que componen el Ibex tenían presencia en dichos paraísos fiscales en el 2011, (lo que representa el 94 % de las compañías que operan en el selectivo español y un repunte del 8% con respecto al 2010), no siendo casualidad que el Banco Santander lidere el ranking de sociedades en dichos paraísos fiscales, seguido de BBVA .
Recordar que la obsesión paranoica de la Banca española por maximizar los beneficios debido al apetito insaciable de sus accionistas al exigir incrementos constantes en los dividendos, provocó que muchas de ellas se transformaran en corporaciones transnacionales y no dudaran en endeudarse peligrosamente en aras del gigantismo, conjugando las OPAS hostiles en la compra de Bancos extranjeros como plataforma de entrada en dichos países con el miope aldeanismo de apertura desbocada de sucursales en otras Comunidades Autónomas.
De ello serían paradigma Caja Madrid (adquisición del 100% del del City National Bank of Florida (CNB) por un monto cercano a los 750 millones de Euros en el 2008) y Caja Navarra (CAN) (apertura de una oficina de “banca cívica” en Washington en el 2008), proyectos de miope ingeniería financiera que les llevó a ambas entidades a su desaparición como marca autónoma (intervención estatal en el caso de Caja Madrid tras convertirse en Bankia y absorción por Caixabank de la CAN, otrora buque insignia de la marca NAVARRA), quedando como restos del naufragio los máximos responsables de ambas entidades en aquellas fechas (Miguel Blesa y Enrique Goñi respectivamente) imputados judicialmente aunque salvados posteriormente por un Tribunal Constitucional convertido en guardacostas especializado en labores de salvamento y socorrismo de altos directivos y políticos implicados en presuntos casos de corrupción.
Los test de estrés
La bajada de tipos de interés hasta el 0,25% y la continuación de la política de barra libre (LTRO) por el BCE ha aliviado los problemas de liquidez de las entidades financieras e incrementado el beneficio de las mismas debido al diferencial entre lo que deben pagar para lograr liquidez del BCE (el 0,5%) y los intereses que marcan en la adquisición de deuda de Estado( cercanos al 5%), beneficios que no han tenido traslación a la economía real en forma de financiación del tejido productivo (pymes y autónomos), sino que se han destinado a la refinanciación de las grandes empresas y los pagos de intereses de deudas contraídas.
Según el economista.es, el dinero público y privado destinado a sanear los balances de entidades financieras inestables alcanzaría ya los 113.259 millones de euros (más del 10 % del PIB), sumados los fondos inyectados tanto estatales como privados y el traspaso de activos tóxicos a la Sared, pero continúan las dificultades para vender las entidades rescatadas por el Estado (Bankia, CCM, Cajasur, Unim, CatalunyaCaixa, la CAM, Banco de Valencia y Novacaixagalicia) así como mantener el banco malo o Sareb, aunque tras la presentación por Bankia de unos beneficios de 509 € en el 2013, asistiremos a su privatización a pesar de haber conseguido el Estado recuperar tan sólo 12.500 millones de los más de 20.000 millones € invertidos en reflotarlo.
Recordar que la Sared o banco malo fue creado para limpiar los balances de los bancos rescatados por el Estado y asumió activos tóxicos por un valor de 50.700 millones de euros (con un mínimo respaldo del 8% de capital mixto estatal y privado (4.800 millones de euros), lo que podría ser insuficiente para soportar posibles pérdidas y hará necesaria una nueva inyección de capital público, descartadas ya la ayudas de la banca privada.
Así, la agencia Moddy´s estimó en octubre que el agujero de la Banca española sería de unos 120.000 millones €, sensiblemente superior a la calculada por la consultora Oliver Wyman al realizar la prueba de estrés la Banca española en el 2012 por lo que el Banco de España ha endurecido las condiciones para que la Banca realice re-financiaciones o re-estructuraciones de créditos.
Así, se considerarán con carácter general que son riesgos sub-estándar, que tienen altas posibilidades de incurrir en impagos en el futuro y si en la actualidad, el 50% de las refinanciaciones ya estarían clasificadas como dudosas o sub-estándar, se deduce que la Banca tendrá que destinar más provisiones para estos créditos.
Además, según cincodias.com, la Autoridad Bancaria Europea (EBA, en sus siglas en inglés) anunció que los tests de estrés de este año serán más duros que los dos anteriores (2009 y 2001) advirtiendo además que someterá a estrés “a todas las posiciones de la banca en deuda soberana” , lo que coloca en una tesitura delicada a la banca española cuya cartera de vencimiento a cumula 246.733 millones de euros en deuda pública según los datos de octubre de 2013 del Tesoro, lo que tendrá como efectos colaterales un aumento de los fondos destinados a provisiones, la consecuente constricción de sus ganancias y por ende del reparto de dividendos e impedirá que el crédito siga sin fluir con normalidad a unos tipos de interés reales a pymes y particulares.
Ello unido a la sustitución de la tradicional doctrina económica del equilibrio presupuestario del Estado por la del déficit endémico (práctica que por mimetismo han adoptado los Ayuntamientos y Comunidades Autónomas), contribuirá a que el déficit público continúe desbocado y la prima de riesgo se acerque a los 300 puntos, lo que unido a las sucesivas rebajas de la calificación de la Deuda del Estado podría incrementar las dificultades para obtener financiación exterior en un futuro mediato.