El presidente del Comité Paralímpico, Miguel Carballeda, ha calificado a los deportistas que representa como «La roja coja». Sí, aunque parezca increíble, este señor se ha atrevido a usar dicho calificativo. Fue en un acto público, delante de ellos y del presidente del gobierno en el Palacio de la Moncloa, a vista y paciencia de la prensa y de los medios internacionales. Lo dijo, sí, y está grabado en vídeo para la posteridad. Y lo dijo como si nada, como quien da los buenos días. Increíble. En cualquier país civilizado sería motivo de despido o dimisión. Un respeto para las personas discapacitadas.
Y lo ridículo del asunto es que el supuso que a los demás le iba a hacer gracia su exabrupto. Como si todos fuesen de su condición. Terrible. Habría que hacer más riguroso los métodos de selección de estos directivos. Antes de jurar su cargo deberia comprobarse el nivel moral y, porqué no, también su salud mental.
Esperamos que haya algún tipo de sanción para que estos hechos no vuelvan a ocurrir. El colectivo de personas con discapacidad no se merece este tipo de trato. Ellos representan a todo un país en los Juegos Paralímpicos.
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