Las encuestas sobre los nuevos comicios electorales arrojan un saldo de unos diez mil nuevos polÃticos en el panorama de nuestro paÃs, ya bastante cargado de por sÃ.
A la sombra del 15M aparece el Partido X que le ofrece a Equo (un Partido que debÃa ser ecologista… y al final casi todos sus dirigentes son comunistas desahuciados en su partido) y a Podemos (nacido en las asambleas callejeras y apoyado por las televisiones privadas a la caza de populismo para ganar cuotas de audiencia) un pacto electoral para conseguir el poder, o mejor dicho, conseguir llegar a ser esa casta que tanto critican. Sin embargo Podemos prefiere apoyar a Ada Colau y su Guanyem (la que siempre habÃa dicho que no le interesaba la polÃtica), a cambio de colocar algunos de los suyos, pero sin quemar el nombre que se ha fabricado a base de criticar desde el sistema polÃtico a todos y cada uno de los dirigentes que desde el 78 gobiernan nuestro paÃs, y dando soluciones muy parecidas a las de la ministra de Trabajo cuando le pedÃa a la Virgen trabajo para los españoles…
¿A qué se debe el éxito de la masiva militancia de Podemos? A la ilusión de participar en polÃticas sin reglas ni corchetes. Los conservadores admiten a sus miembros en buena parte por ser ‘hijos de…’  familiares de dirigentes del régimen, o reconocidos personajes de la derecha conservadora. El PSOE necesitaba el aval de dos militantes que confirmaran que la persona apoyada se definÃa como progresista. En los nuevos partidos, se inscriben por Internet, nadie sabe quiénes son ni su capacidad de gestión polÃtica, sus dirigentes sin embargo son hijos de ‘papás nuevos ricos’ que pudieron permitirse pagarles una vida holgada para poder estudiar, pero ¿y los demás? ¿esos diez mil?
DecÃa un viejo dirigente en TV: Podemos ha pensado no concurrir a las municipales porque en los pueblos y ciudades se conocen todos y en la foto de Podemos encontrarÃamos lo peor de cada casa (antisistema, violentos etc., etc.,) y no quieren quemarse para las generales, que son las que a ellos les interesan.
El sistema polÃtico es muy frágil. Los viejos decÃan que el poder corrompe… Si entre gente que conocemos salen garbanzos negros, imaginemos colocar en nuestras instituciones diez mil nuevos lobos sedientos de poder…