Sociopolítica

Monsergas, monsergas y más monsergas

 

            ¿Pero a quién o a quienes creen que hablan estos inútiles políticos que nos han llevado a la ruina? ¿A tontos o imbéciles… a seres que no tienen sentido común e ignoran el sentido de deducir por sí mismos y llegar o aproximarse a la verdad? ¿O a impotentes que tenemos que tragarnos todo lo que digan y luego no responder de nada? “El tiempo de comulgar con ruedas de molino”, hace siglos que pasó… ¿O es que quieren instaurarlo de nuevo y establecer la más cruda de la razón de la fuerza como en aquellas épocas tristes en que un ser humano valía menos que el perro del amo?

 

            Y me da igual el discurso del alcalde, que el del rey o del presidente republicano de donde sean, todos, absolutamente todos, nos lanzan monsergas (por no decir cosa peor) mientras ellos viven con unos poderes y derroches que no se reducen por nada del mundo… “y el gobernante que no predica con el ejemplo no es digno de tenerse en cuenta”; y si bien en épocas de “vacas gordas” igualmente podemos practicar aquello de la “vista gorda”; pero en épocas de “vacas flacas” o de penurias ya acuciantes, hemos de hablar claro y mucho más los que se atreven a sentarse en sitiales de gobierno, de los que tienen que responder con toda la limpieza que requiere cada cargo, puesto que hay que recordarles que… “cargo viene de carga” y que no es un regalo que nadie les haga para que con él hagan lo que mejor le venga en gana… “que no olviden nunca que son meros administradores de unos bienes públicos de los que tienen que responder”… aunque no respondan nunca y a lo sumo, nos endiñen esas monsergas que ya nadie traga y que además, causa la risión del que las oye, lo que –no se olvide ello- es algo así como… “una inmensa pila que va acumulando mucho veneno y que éste y como ha ocurrido infinidad de veces, termina limpiando las guillotinas históricas”; de las que nunca ha resultado nada bueno, puesto que de momento se pasa a situaciones mucho peores; y creo no necesito recordar ningunos hechos concretos y de los que reitero… la historia del pobre hombre que poblamos este planeta… está llena.

 

            No nos pueden pedir estímulo, austeridad, más trabajo, menos salarios, menos pensiones (último discurso de Navidad) mientras los administradores viven en unas condiciones ya muy criticables y no ceden nada, o apenas nada para dar ejemplos que nos convenzan.

 

            Necesitamos verdaderas leyes igualitarias y no más o menos draconianas, en las que se apalancan incluso los responsables de todos estos desastres, para seguir acaparando fortuna o blindándose con retiros o jubilaciones bochornosas en relación a lo que les dejan a la masa y la que se atreven a pedirle aún más esfuerzos… ¿para qué?

                        Pienso que como tuvo que hacer Churchill en su momento y en situación mucho más grave que la actual… lo que necesitamos son nuevos «Churchilles» (que a la vista está no hay ni uno) que con un par de «cojoncios» y bien asesorados por verdaderos economistas, NO VENDIDOS; digan desde «sus balcones», ese «sólo sangre sudor y lágrimas os podemos ofrecer… pero venceremos». Pero para ello, pienso que hay que limpiar las administraciones de parásitos y bajar sensiblemente los presupuestos desde a la familia real, o presidentes republicanos, hasta el último Y NECESARIO verdadero funcionario estatal. Dejando más dinero a la iniciativa privada (única que de verdad crea riqueza y por ende puestos de trabajo, sobre todo el pequeño y mediano empresario) Y SABIENDO CONTROLAR A LOS GRANDES PARÁSITOS O MULTINACIONALES DEL DINERO O DE LO QUE SEA; poner a trabajar al que quiera (y al que no, también) y sabiendo que TRABAJA PARA Á‰L Y QUE AL ESTADO PAGARÁ UNA PARTE MÁDICA del fruto de su trabajo… y así (ES LO QUE HIZO EL TAN CRITICADO FRANCO QUE PARTIÁ DE UN SOLAR Y DEJÁ A ESPAÑA ENTRE LAS DIEZ PRIMERAS MUNDIALES) es como de verdad se progresa; el pueblo (la masa) sólo quiere eso; un trabajo razonablemente bien remunerado y seguridad en sus bienes y personas, amén de una libertad natural y que le es propia desde que nace y por derecho “sobrenatural” (nadie se la tiene que dar y menos quitar); quién le gobierne, “le importa un rábano”.

          Mientras no se acabe con el exceso de parásitos, esto seguirá cada vez peor y al final… “ya lo he escrito arriba y no creo necesario reiterarme”.

 

            Y dejen ya de lanzarnos más monsergas; hablen claro o cállense; y que “la rueda siga girando”; y que como siempre, que cada cual… “saque los cuernos por donde pueda” y caiga quién caiga… en esa insolidaridad que incluso fomentan los que dicen gobernar y que a la vista están los resultados de esos malísimos gobiernos.

Antonio García Fuentes

(Escritor y filósofo)

www.jaen.ciudad.org (allí más)

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.