Sociopolítica

«No podemos conducir por ti»

EL CRISOL    –    Pascual Mogica Costa

                  

    El titular de este comentario lo he recogido de aquel eslogan que la Dirección General de Tráfico (DGT) difundió a través de los medios de comunicación allá por abril de 2007.

    Creo que a nadie que tuviera conocimiento de ello se le habrán olvidado aquellas palabras que pronunció Aznar en Valladolid, al recibir la medalla de honor de la Academia del Vino de Castilla y León el 3 de mayo de 2007. Aznar criticó este advertencia de la DGT diciendo aquello de: “¿Quién te ha dicho que quiero que conduzcas por mi?”. Añadiendo a continuación: “Déjame que beba tranquilamente, no pongo en riesgo a nadie ni hago daño a los demás”. Pero dijo más: “Las copas de vino que yo tengo o no tengo que beber déjame que las beba tranquilamente”. Se olvidaba Aznar que durante su Gobierno, la DGT, con fecha 6 de mayo de 1.999, puso en vigor la reducción de tasas máximas de alcohol permitidas para conducir. O sea se pronunciaba contra las normas que él había puesto en circulación para controlar la tasa de alcoholemia en conductores. O en esos momentos en los que pronunció esas palabras durante el acto en la Academia del Vino sufrió un lapsus de memoria o es que había “hechos los honores” con tanta cortesía que se “pasó” un poquito. Dicen que hay muy buenos vinos en Castilla y León. El tinto de Toro es uno de ellos.

     Digo esto porque en ocasiones las personas mayores no nos damos cuenta de que con nuestra actitud equivocada podemos causar un daño a la juventud que en bastantes casos suele fijarse mucho en lo que hacen y dicen los que ya van peinando canas. El caso del presidente de Nuevas Generaciones del Partido Popular, Nacho Uriarte, puede ser uno de estos. Según nos cuentas distintos medios de comunicación el presidente de las juventudes del PP y diputado del Partido Popular en el Congreso de los Diputados, ha sido imputado por colisionar con un coche que estaba parado en un semáforo en rojo, demostrándose, por la prueba de la alcoholemia, que Uriarte dio positivo con un índice de 0,52 miligramos, más del doble de lo permitido.

     Es de esperar que Aznar haya tenido conocimiento de ello y se haya arrepentido, lo dudo en Aznar que no se ha arrepentido de la de Iraq, de las palabras que dijo en especial de las de “no pongo en riesgo a nadie ni hago daño a los demás” porque en este caso sí hubo daños materiales que afectaron al vehículo que estaba parado en el semáforo. Miedo me da pensar si en vez de un coche parado y es de suponer que con las luces encendidas, que no vio Uriarte, y mira que un coche abulta, se hubiera tratado de un peatón cruzando la calle. En cualquier caso hay que decirle a Aznar que tenga más cuidado y que antes de hablar mire si hay niños escuchando.

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.