No sé cómo llegó el ERE para LA VERDAD a la mesa de redacción. Tal vez por un correcto burofax. Llamé al periódico para plantearle a su director la oportunidad de una posible iniciativa conjunta. Quien me cogió el teléfono me advirtió que estaba reunido y no podía atenderme. Normal a la hora de cierre de edición. Ya volvería a intentarlo.
A la mañana siguiente supe que la conversación citada era sobre la posibilidad más que posible del cierre de LA VERDAD DE ALBACETE. No era un futurible. La piqueta se envició con Albacete, consiguiendo derruir más de cien edificios modernistas. Sí, tantos, según el estudio de Elia Gutiérrez Mozo, que los describe, enamorada de tanta belleza y triste por tan gran pérdida. Se demolieron, en la ciudad asomada al sureste de España, en los prometedores años sesenta, edificios semejantes al que alberga al Colegio Notarial de la calle ancha, el Chalet de Fontecha o el edificio del Gran Hotel.
En estos tiempos de cambios de época, los periódicos de papel son amenazados de cierre. Uno de ellos, amenazados por la piqueta, es LA VERDAD de ALBACETE. Podemos quedarnos sin esta cabecera, mañanera entre nosotros, medio centenaria.
La ciudad, así renombrada por favor de Isabel II y antes Villa por el marqués de Villena don Manuel, ha estado siempre asomada al Mediterráneo, gustosa de volar, agradecida a quienes abrían tiendas norteñas en sus calles y a quienes del sureste encontraron noticiable su diario quehacer de ciudad ferial por antonomasia y comercial consecuentemente.
Cada Feria, durante casi medio siglo, hemos acudido al convite de la dirección murciana de nuestra Verdad. Le hemos agradecido, nosotros castellano manchegos, con el recuerdo de pertenecer al común reino, su amistad. Luego a luego parece ser que las decisiones comerciales se comenzaron a tomar en la capital, no del reino de Murcia, sino en la capital del reino de España y Albacete era solo un pueblo de caza.
Ahora, que para el papel de periódico le han llegado rebajas, Albacete les queda lejos y pretenden cerrar esta cabecera del Molino de Papel. La directiva del Parque Empresarial de Campollano, con su Presidente Eduardo López Espejo, dice no al cierre; también la asociación de los Teatros de España, que preside Javier López Galiacho; e igualmente la Asociación por la Cuchillería de Albacete y su presidente, Juan Andrés Barbero.
Albacete entero lo dice: “Deseo que continúe La Verdad en Albacete, porque forma ya parte inseparable de esta provincia. ¡Adelante! Allí pusieron lo mejor de sí mismos otros hombres que ya son también historia: Ramón Ferrando y José Sánchez de la Rosa”. Firma Francisco Fuster Ruiz, colaborador habitual de este periódico entrañable y con él firma Albacete.