Los días 10 y 11 visité una Exposición Anual Estudiantil escasamente promocionada.
El tema principal fue mostrar los avances en esa área educativa y el empleo de nuevas tecnologías aplicadas. Son escuelas secundarias con orientación técnicas del área de Resistencia, Chaco, Argentina.
Un sendero de micro espacios con alumnos explicando sobre métodos y herramientas diversas de aéreas desde la mecánica hasta la explotación avícola, pasando por todos los rubros tecnológicos, pero lo que más atraía a los visitantes era los micros robots. Con infinita paciencia las jóvenes expositoras del 3º 1ª C.S.I.P.P del colegio E.E.T nº 24 Simón de Iriondo, supervisados por un profesor me introdujeron con palabras simples en el mundo complejo de esta tecnología; aplicaban los conocimientos de forma sorprendente, usan componentes electrónicos rescatados de los elementos de rezago. El taller básicamente se nutre de artefactos domiciliarios enviados para el reciclado, los desechados, dicho de otra forma ‘tirados a la basura’ de allí extraen los elementos y forman muchos pequeños aparatos robotizados en la práctica de sus enseñanzas con ínfimos recursos.