La Unión Europea es un éxito sin parangón a nivel histórico, la mayor unión voluntaria y pacífica de países independientes de todos los tiempos, pero es un fracaso estrepitoso a la hora de saber comunicar al ciudadano medio su importancia, sus ventajas e inconvenientes, lo qe ha provocado un evidente desapego de la ciudadanía europea de todo lo relacionado con la institución.
El 7 de junio se celebran elecciones al Parlamento Europeo y se preveen porcentajes de abstención realmente elevados, al igual que sucedió con la el referendum de la fallida Constitución Europea, y todo ello se debe a que las instituciones europeas no han sabido hacer llegar su mensaje a la sociedad y a que a los políticos nacionales no otorgan a estas elecciones la importancia que merecen, extrapolando los problemas nacionales e ignorando los retos a nivel europeo.
¿Qué es el Parlamento europeo? Es el órgano de representación popular de la Unión Europea. Los ciudadanos de los Estados miembros eligen a sus representantes nacionales, en función de unos cupos previamente delimitados, y éstos pasan a formar parte del Parlamento, en el que, por tanto, se encuentran los políticos que han sido elegidos democráticamente para representar a sus respectivos países.
¿Para qué sirve el Parlamento Europeo? Tiene tres funciones esenciales: legislativa, presupuestaria y de control.
Todas las leyes (directivas, regulaciones, etc.) europeas tienen que ser aprobadas por el Parlamento Europeo, por lo que la composición de éste es esencial. Por ejemplo, un Parlamento con mayoría de partidos de izquierda promulgaría leyes que lucharían contra el cambio climático de una manera efectiva.
La función presupuestaria es la que otorga al Parlamento Europeo la competencia para, junto al Consejo Europeo, elaborar y aprobar el Presupuesto de la Unión Europea. Por ejemplo, un partido como el Partido neonazi austriaco con mayoría en el Parlamento intentaría desviar todos los fondos a gastos de defensa, abandonando los gastos de educación.
Y, por último, el Parlamento Europeo es el órgano que supervisa y controla a la Comisión Europea (poder ejecutivo) con el objeto de garantizar la labor honesta, ética y a salvo de todo tipo de corrupción de sus miembros.
El Parlamento Europeo es esencial para el desarrollo de nuestras vidas, aunque no lo percibamos así. No hay que olvidar que la libertad de los países membros para ejercer políticas nacionales es muy limitada, ya que se encuentran supeditados a las leyes aprobadas por el Parlamento Europeo.
El ejemplo más evidente es la política económica, con fuertes restricciones para mantener la estabilidad a la vez que se busca la redistribución de la renta entre países, que limita hasta límites extremos la capacidad de acción de los gobiernos nacionales.
Por tanto, no nos queda otra que votar y elegir así el color del Parlamento que nos representará en los próximos años.