Que también «la teoría de la conspiración del 11-M» apadrinada por Pedro J. Ramírez ha tenido que ver con su salida de la dirección del periódico El Mundo me parece una posibilidad nada descabellada. Poner el acento solamente en cuestiones económicas, de comunicación multimedia y licencias audiovisuales o en su reciente enfrentamiento con el PP por el «caso Bárcenas» significa, desde mi punto de vista, una falta de visión de los todos motivos de su cese, dimisión, abandono o lo que quiera que haya sido.
Antes del «caso Bárcenas» el idilio conspiranoico entre El Mundo-Pedro J. Ramírez y el PP se rompe al poco tiempo de llegar Rajoyy el PP al Gobierno en noviembre de 2011, en la medida que aquel compromiso conjunto adquirido cuando estaban en la oposición al Gobierno de Zapatero de que cuando llegasen ellos al Gobierno iban a esclarecer el 11-M quedó rápidamente roto. Soraya Sáenz de Santamaría, María Dolores de Cospedal, Esteban González Pons, Javier Arenas, Ignacio Cosidó, Rosa Díez (UPyD) y un largo etc. llenaban páginas y páginas de El Mundo diciendo que iban a «desclasificar los documentos» e «investigar el 11-M» para que «se conozca la verdad». Pero el tiempo ha ido pasando y esos dirigentes políticos, sin nada que poder rascar acerca de la autoría del terrorismo islamista en los atentados de los trenes de cercanías de Madrid, han terminado por no seguir el paso de las mentiras y manipulaciones de Pedro J. Ramírez. Digamos que se han ido desmarcando paulatinamente y le han «dejado tirado».
Refiriéndose a Pedro J. Ramírez, en el mismo periódico El Mundoescribía hoy Enric González, entre otras cosas, lo siguiente: «…A veces contradictorio e incoherente, mucho más interesado en vender diarios que en dar ejemplo de comportamiento ético, obstinado en la investigación incluso cuando yerra (como en la mayor parte del 11-M),…»
Por si fuera poco para Pedro J. Ramírez y El Mundo, en estos días, el que fuera Jefe de los TEDAX el 11-M, Juan Jesús Sánchez Manzano, ha publicado el libro LAS BOMBAS DEL 11-M: RELATO DE LOS HECHOS EN PRIMERA PERSONA, finiquitando el chiringuito conspiranoico.
Si el 11-M ha sido el GRAN NAUFRAGIO periodístico de Pedro J. Ramírez, también el 11-M ha sido su gran fracaso como gestor, porque si pensaba que con su «teoría de la conspiración del 11-M» iba a conseguir más publicidad, vender más periódicos y conseguir más dinero, parece que, definitivamente, los números rojos no le han dado la razón.