Sociopolítica

Pedro J., tú mismo ‘ametrallas’ tu conspiranoia

El 30 de septiembre de 2013 y con un gran titular en portada, El Mundo vuelve a la carga con el 11-M. Dice que: ‘La Audiencia Provincial de Madrid ha ordenado investigar si en efecto las tarjetas utilizadas en las mochilas bomba del 11-M fueron «suministradas» al grupo terrorista por Jamal Zougam, como se afirma en la sentencia por el atentado, o si por el contrario fueron despachadas en el mostrador en una venta ordinaria atendida por un empleado del locutorio del marroquí, que se dedicaba a la distribución de todo tipo de productos de telefonía en el barrio de Lavapiés, el de mayor presencia de musulmanes‘.

Pedro J. Ramírez

Pedro J. Ramírez. Foto: http://www.flickr.com/photos/irekia/

No hay nada nuevo a lo escrito ya en mis dos entradas al Blog tituladas MOHAMED BAKKALI DICE QUE FACILITÁ LAS TARJETAS QUE ACTIVARON LAS BOMBAS DEL 11-M  y  EL 11-M, ZOUGAM, PEDRO J. RAMÁREZ Y EL ATENTADO EN LA «117» MARATÁN DE BOSTON. Inocente o culpable Jamal Zougam, lo verdaderamente cierto, lo verdaderamente importante–entérate de una vez Pedro J.– es que allí, en la tienda regentada por Zougam, se vendieron las tarjetas de los móviles que los terroristas islamistas utilizaron para preparar las bombas y ejecutar los atentados. Por eso, cada vez que Pedro J. Ramírez y El Mundo reivindican la inocencia de Jamal Zougam, lo sea o no, lo que están haciendo es validar la realización de los atentados por parte del terrorismo islamista.

El «tiro en el pie» no sólo se lo da Pedro J. Ramírez. Se lo da también el vicedirector de El Mundo Casimiro García-Abadillo. El que otrora dijera: «Pero es que, sin la detención de Zougam justo 24 horas antes de las elecciones, el carácter islamista del atentado se habría quedado en pura especulación«, hoy dice: «Después de muchos años de investigación, no tengo prácticamente ninguna duda de que sus autores (al menos, parte de ellos) fueron los llamados suicidas de Leganés. Es decir, que el atentado (con colaboración o no) fue obra de un grupo yihadista». ¡Ahí te quiero ver Casimiro! ¡Leer para creer! No fue un «grupo de pobres moritos de Lavapiés» sino que fue un grupo yihadista. ¡Un auténtico «disparo» en el argumentario que mantiene la conspiranoia! ¡Lo tuyo, Casimiro, más que un «tiro en el pie» es un «ametrallamiento»!

Estos «tiros en el pie» lo que me hacen suponer es que Pedro J. Ramírez –que vuelve a «disparar» contra Pilar Manjón con el punto de mira ya puesto en la conmemoración del 10º aniversario el próximo 11 de marzo de 2014– lo que pretende es, a costa de amputar su argumentario conspiranoico, proporcionarse una salida airosa, tratar de convertir el 11-M en el «caso Zougam», para tratar de quedar bien y tratar de ocultar así su estrepitoso fracaso.

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.