La Semana Santa se acerca y si estás pensando en hacer un viaje, seguramente tengas en cuenta una gran cantidad de cosas que meter en la maleta. Para ayudarte a hacer una maleta mucho más segura, que te permita disfrutar mucho mejor de tus vacaciones, te recomendamos que no se te olvide contar con un seguro de viaje.
Un seguro de viaje es la herramienta más importante para poder disfrutar de unas vacaciones más tranquilas, con la total seguridad de que una compañía se encontrará pendiente de nosotros y se preocupará ante cualquier tipo de problema que podamos tener.
Por qué es necesario tener un seguro de viaje
Estos seguros son siempre muy recomendados, pero todavía lo son más aun cuando se trata de hacer un viaje al extranjero. En este artículo vamos a ofrecerte algunas razones para invitarte a pensar todas las ventajas que conlleva disponer de un seguro de viaje, para que puedas entender mejor como puede mejorar tu descanso y por lo tanto permitirte disfrutar mucho más del viaje.
La sanidad en otros países
Cuando pensamos en ir al médico, es inevitable pensar que es gratuito. Sin embargo, no en todos los países cuentan con una sanidad gratuita como en España y realmente los gastos médicos pueden llegar a ascender a una suma bastante importante.
De hecho, dependiendo del tipo de cuidado que necesitemos, estos gastos pueden llegar a superar el coste total de las vacaciones. Aunque parezca una auténtica barbaridad, entre la estancia en el centro hospitalario, las medicinas que nos hayan puesto y las pruebas que se hayan llevado a cabo, la suma puede ascender a una gran cantidad de dinero.
Para que te puedas hacer una idea mucho mejor, un día en un hospital de Estados Unidos nos puede salir por 3.800€ y por poner otro ejemplo, una resonancia magnética en los Países Bajos cuesta alrededor de 400€. Desde luego que son sumas más que prohibitivas, que a veces no queda otro remedio que afrontarlas debido al problema de salud que podamos padecer, pero que serían completamente cubiertas por el seguro de viaje si lo necesitamos.
Además de cubrir estos gastos, otra de las ventajas que tenemos con respecto a la sanidad en otros países, es que nuestro seguro se encarga de todo lo que haga falta. Esto quiere decir que, si nos encontramos mal, bastará con ponerse en contacto con el seguro de viaje para que, a partir de ahí, ellos empiecen a tramitar todo lo necesario en lo que respecta a los hospitales.
Esto quiere decir que no tendrás que preocuparte por ir a un hospital determinado o lidiar con el idioma, en el caso de que tengas problemas. El seguro se encarga de todo, desde llevarnos al hospital concertado, hasta pagar los gastos derivados del mismo.
Esto tiene mucho más valor cuando al país al que vamos, practicamos alguna actividad de riesgo. Por ejemplo, si vamos a la nieve o queremos practicar cualquier otro deporte del que podamos sufrir una lesión, con el seguro estaremos cubiertos ante cualquier tipo de problema.
Cancelación de viaje
Un seguro de viaje nos permite también disfrutar de una cobertura a través de la cual se nos puede devolver el coste del viaje en el caso de que al final no disfrutemos del mismo. En algunos casos, algunas personas se han encontrado con problemas de última hora que les han impedido disfrutar del viaje mientras que este ya se encontraba del todo pagado. Estos problemas implican además de no poder disfrutar del viaje, perder el dinero que hemos pagado por el mismo.
Con un seguro de viaje, tendremos estos gastos de cancelación cubiertos. Ahora bien, existen muchas coberturas a tener en cuenta en el caso de cancelar un viaje. Esto quiere decir que tendremos que justificar dicha cancelación y no lo podremos hacer por placer. Es importante tener en cuenta las cláusulas que nos van a compensar la pérdida del viaje, en donde las más habituales suelen ser por problemas de enfermedad o problemas relacionados con el trabajo.
Así mismo, los seguros de viaje también nos pueden devolver parte del dinero si el viaje se ha interrumpido y disfrutado a la mitad. Imagínate que los problemas anteriormente mencionados no se han dado antes del viaje, si no que se han dado durante el mismo. Tienes que presentarte de forma inmediata a tu puesto de trabajo al día siguiente o el fallecimiento repentino de un familiar te obliga a interrumpir tu viaje de repente.
En este caso, el seguro no solo se encargará de cubrirte aquellos días por los cuales no has disfrutado, si no que también se hará cargo de los costes que tienen que ver con el regreso anticipado del mismo.
Demoras y equipaje
Con un seguro de viaje podemos estar tranquilos con las demoras. Cuando se viaja en avión, existe cierto riesgo de que el viaje se demore o que el vuelo se pueda llegar a cancelar. Esto supone un problema debido a que tenemos que lugar un buscar en donde pasar la noche y lidiar con unos gastos con los que no contábamos, ya que además del alojamiento, tendremos que comer o cenar. ¿Tienes un seguro de viaje? Puesto esto deja de ser un problema, ya que el seguro se encarga de todos estos gastos imprevistos.
Por otro lado, si has tenido problemas con el equipaje, algo también bastante frecuente desgraciadamente, con un seguro de viaje el problema será mucho más pequeño. Para empezar, el seguro se encargará de poner en marcha toda la maquinaria para localizar, recuperar y devolverte tu maleta y mientras tanto, el seguro te reembolsará toda la cantidad necesaria para poder disfrutar de los artículos de primera necesidad que llevabas en tu maleta. Así mismo, si el problema es mayor porque la maleta no ha sido perdida si no que ha sido robada, el seguro también correrá a cargo con los gastos pertinentes.
En definitiva, no existe ninguna razón que invite a pensar que un seguro de viaje no es necesario. Contar con un seguro de viaje es la forma más inteligente y segura de poder viajar, ya que tendrás a toda la maquinaria de una compañía aseguradora encargada de que disfrutes tus vacaciones. Olvídate de los problemas, di adiós a los miedos y disfruta de esos días tan especiales que has escogido. Con un seguro de viaje, podrás descansar mucho mejor.
