Este mes se inició la construcción del nuevo complejo del Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (INDICASAT-AIP), con una inversión de US$20 millones.
El complejo hospedará el nuevo Centro de Neurociencias y posteriormente a los centros de Ciencias Ambientales y Ecología (cuya construcción está programada para 2012), de Bioinformática (2012) y de Ingeniería Médica (2013).
“La idea no es solo entrenar a especialistas nacionales, sino abrir el compás para que haya acceso y una verdadera transferencia de tecnologías y recurso humano [desde y hacia otros países]”, explicó a SciDev.Net Gabrielle Britton, investigadora y neurocientífica de INDICASAT-AIP.
Asimismo, a principios de junio se confirmaron alianzas con dos premios Nobel de química: Robert Huber (ganador en 1988), del Instituto Max-Planck, en Alemania, y Ada Yonath (ganadora en 2009), del Instituto Weizmann, en Israel, quienes asistieron a la “Conferencia internacional sobre nuevos descubrimientos en el cerebro”, en Ciudad de Panamá (30-31 mayo).
En el marco de su visita, la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SENACYT) proporcionó dos subvenciones para proyectos internacionales en aras a desarrollar colaboraciones entre los Nobel y científicos panameños que laboren en el INDICASAT-AIP.
Estas iniciativas son parte del plan maestro que el país desarrolla a mediano y largo plazo para posicionarse como el centro de estudios científicos más importantes de Centroamérica.
En este marco, Panamá se ha propuesto aumentar la inversión en ciencia y tecnología desde el 0,2 por ciento del PIB a mediados de la década del 2000, a 0,6 por ciento para 2014.
A nivel internacional, Panamá ya es un referente de la ecología, gracias a la presencia centenaria del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales.
Para lograr la transferencia de recurso humano, el país ha atraído a investigadores como el experto indio en neurociencias Jagannatha Rao, director del INDICASAT-AIP, quien ha aportado a Panamá sus conocimientos y contactos con científicos de talla mundial, como Huber y Yonath.
En últimos años Panamá ha incrementado significativamente la formación de recurso humano a través de becas: 446 becarios panameños son financiados por SENACYT para seguir estudios de posgrado en el extranjero, con incentivos para retornar al país a desarrollar sus investigaciones.
Además existen programas que apoyan a los estudiantes durante sus estudios y aseguran su inserción laboral.
“Es importante que los investigadores panameños se relacionen con sus contrapartes de otros países, pues están muy enfocados en Estados Unidos; lo que no sorprende, dada la historia de ambas naciones”, señaló Huber a SciDev.Net.
“Pero deben abrir sus ojos ante Suramérica. Brasil, por ejemplo, tiene excelente investigación científica, al igual que Argentina y Chile”, concluyó el Nobel.
Sofia Kalormakis
27 julio 2011 | ES
Fuente: SciDev.Net