Lo primero que debemos tener claro es el número total de parados: 4,1 millones según el SEPE (el antiguo INEM). ¿Es esta cifra fiable? Si la comparamos con los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), ciertamente más fiable, esta sitúa el número de parados en 4,8 millones.
Es obvio que España no consigue acabar con el paro. Ni PP ni PSOE lo han logrado hasta la fecha y vamos de mal en peor, porque las cifras macroeconómicas van muy bien (más exportaciones, más turismo…) pero las familias siguen mal. Algo no funciona.
De Ciudadanos y de Podemos mejor no esperar, visto lo visto, muchos milagros.
PSP: Partido Sin Paro
La única solución real para acabar con el paro es que los parados creen un partido político, el PSP (Partido Sin Paro), para que los interesados puedan resolver su propio problema… porque está muy claro que los políticos que cobran no lo van a hacer inmediatamente.
Todos los parados se afiliarían gratuitamente, con lo que hablamos de un Partido con muchos votantes. Si cada parado tiene una media de 2 personas con capacidad de voto (cónyuge, familiares mayores de edad, amigos…) ¿alguien duda que este partido no tenga más de 9 millones de votantes? ¡Tendría la mayoría absoluta!
Las pautas para organizar la estructura interna del partido son muy simples (si hasta Podemos lo ha conseguido…) con un objetivo único: acabar con el paro.
Keynes estudió que los mercados no generarían automáticamente el pleno empleo y que durante las crisis económicas podría haber largos periodos de paro a gran escala. Sostenía que el Gobierno tenía el deber de aliviar el sufrimiento de los parados aumentando la demanda agregada de bienes y servicios.
Cuando John Maynard Keynes (1883-1946) estudia los distintos elementos que dan título a su obra de referencia, “Teoría general del empleo, el interés y el dinero”, encontramos dos importantes puntos de referencia, Renta y Expectativas…
Los parados en España ni tienen renta para consumir ni expectativas de solucionar su situación.
Un PSP permitiría un vuelco real a esta situación de manera muy rápida, porque también lo dijo Keynes: “A largo plazo todos estaremos muertos”.