Estaba pensativo esta mañana, aquí nunca pasa nada ningún político asume sus errores y mucho menos rectifica cuando se equivoca, ni pide perdón por sus descalificaciones a otros.
No asumen nunca sus errores, ellos son perfectos intocables, cesares modernos a los que nadie puede llevar la contraria, ni siquiera corregir en sus faltas, su orgullo es tan gran desmedido que nadie puede tocarlos, nadie puede pensar diferente a ellos, si lo haces no eres una persona digna de su atención y toda critica por pequeña que sea genera una reacción de estar contra el ser supremo que se conoce como político.
Ese ser henchido de orgullo que vive en una burbuja que nadie puede romper ,rodeados de una corte de aduladores y portamaletas que asienten en todos los discursos, ríen y aplauden las gracias del político de turno ,que solo se para a saludar a sus representados cada cuatro años, no es cuestión de contaminarse de normalidad.
Su nivel de egocentrismo es cada día mayor, mientras todos los súbitos sueñan con ser funcionarios para vivir tranquilos, y con cargo al presupuesto.
La sociedad se rindió hace años y los políticos saben, nada de lo que hagan será criticado por nadie, ni siquiera la prensa levantara la voz, no sea que la propaganda institucional no les llegue, les quiten su licencia de radio o televisión o simplemente el gobierno no les programe publicidad en sus medios con el consiguiente quebranto a sus cuentas.
Todos callan, ellos lo saben, todos son sumisos, unos por cuestiones crematísticas, otros por intereses políticos, y algunos por sumisión para evitar polémicas, con una sociedad tan sumisa es fácil ser corrupto y corromper a otros nadie va a protestar,
Cada día esta todo mas entrelazado entre sí para que la gente no piense ,simplemente se deje llevar ,aislando de su vida la política pensando que no les afecta, cuando no es así todo lo que sucede a nuestro alrededor nos afecta , lo duro es que nadie levante la voz.
Medios críticos casi no quedan todos están a la sombra del poder, todo es sumisión quietud y resignación, mientras el paro sigue subiendo aquí nadie dice nada, nadie levanta la voz, ni siquiera los sindicatos esos que dicen estar al servicio de los trabajadores a los que dicen representar.
Nadie se moviliza por nada, mientras que el país se va al garete nadie, se mueve lo mas mínimo por molestar al gobierno.
Mientras los borreguitos siguen su camino hacia al abismo…