El año pasado, los investigadores de Colombia acogieron con beneplácito la adopción de una legislación que obliga a invertir el diez por ciento de las regalÃas mineras en ciencia, tecnologÃa e innovación.
Pero ahora, algunos están cuestionando esa decisión de canalizar gran parte de las regalÃas del primer año, alrededor de US$ 450 millones, a regiones con una infraestructura de investigación pobre, asà como a regiones consideradas focos de delincuencia.
Para determinar la cantidad de dinero que irá a cada una de las 32 ​​regiones, el gobierno utilizó fórmulas basadas en indicadores como población, pobreza y desempleo.
Esto significa que las regiones menos desarrolladas obtendrán una gran parte de los fondos, aun cuando no cuenten con una adecuada infraestructura de investigación. Una de estas regiones es Córdoba, mejor conocida por su tradición ganadera y por ser un bastión de grupos paramilitares y bandas criminales que por su desarrollo cientÃfico. Aun asà recibirá alrededor de siete por ciento de las regalÃas.
Según datos del Observatorio Colombiano de Ciencia y TecnologÃa, en 2010 solo habÃa 41 grupos de investigación en Córdoba en comparación con 194 en Santander, una región que recibirá apenas la mitad de ese porcentaje.
Hernán Jaramillo, decano de EconomÃa de la Universidad del Rosario, en Bogotá, dijo a SciDev.Net que existe el riesgo de que tales inversiones no sean eficientes, ya que puede tomar mucho tiempo producir resultados cientÃficos en esas regiones.
Suponer que las respuestas a los problemas que afectan a ciertas regiones se encuentran en esas mismas regiones puede no ser cierto, de acuerdo con Jaramillo. Por ejemplo, dijo, a pesar de que la malaria es endémica en las zonas rurales como el Chocó y la costa Caribe, la infraestructura cientÃfica para estudiarla está en centros urbanos, como Cali y MedellÃn.
Pero Jaime Restrepo Cuartas, director del Departamento de Ciencia, TecnologÃa e Innovación (Colciencias), dijo a SciDev.Net que «el criterio aquà es la regionalización de la ciencia».
«La idea es tener un desarrollo cientÃfico más equilibrado de las regiones, lo que permitirá a las menos desarrolladas ser más competitivas».
Restrepo dijo que entendÃa a los investigadores de las universidades más importantes, quienes preferirÃan seguir recibiendo la mayor parte de los recursos. Sin embargo, agregó: «Creo que esta distribución permitirá a las regiones como Córdoba ser más fuertes en capital humano y desarrollo tecnológico».
Pablo Correa
SciDev.Net
20 enero 2012