Economía

Sociedad de consumo actual: sociedad de termitas voraces

Las termitas devoran la madera de los arboles, pero normalmente su población está controlada para no caer en el problema de devorar todos los arboles de una zona y no quedar más comida, entonces en esos momentos deben emigrar para buscar más alimento o morir.

Nuestra sociedad de consumo es salvaje, o voraz, ya que consumimos mucho más de lo necesario y eso beneficia a las empresas, pero no a todas por igual, por supuesto. Tenemos una dependencia excesiva del petróleo y muchos subproductos, como los plásticos, es difícil proveerlos mediante el reciclaje, y no existen métodos alternativos al petróleo rentables.

Hace mucho tiempo, los empresarios impulsaron la idea de la moda como medio de garantizar el consumo de prendas textiles año tras año, pero a corto o medio plazo eso supone un incremento de los residuos, otro gran problema de esta sociedad de consumo, y que en muchas ocasiones se envían a países subdesarrollados.

Las tasas actuales de contaminación se compran a terceros países para que países como Estados Unidos o China, entre otros, puedan seguir produciendo a igual ritmo sin reducir emisiones a la atmósfera.

Básicamente, en esta sociedad todo se reduce a cifras o dinero. Si es más barato pagar una sanción por delito medioambiental que evitarlo, se paga la sanción. Si realizar productos de alta calidad supone a la larga menos ingresos, entonces se producen de una calidad mínima, con mayores beneficios, etc.

Todo se reduce a la Economía. Es decir, los beneficios obtenidos son el resultado de las ventas o ingresos menos los gastos y esto se aplica incluso a las personas para ofrecerles un salario u otro.

Incluso les ocurre a las empresas eléctricas con la producción eléctrica por medios convencionales como saltos de agua, centrales térmicas o centrales nucleares, con altos costes de inversión para su construcción y mantenimiento, frente a energías renovables como molinos de viento o energía solar, con costes mucho más económicos de instalación y mantenimiento. El problema actual es que deben vender a un precio que les resulte rentable y ello supone incluir un canon para que las renovables no resulten más baratas. Detrás de las nuevas prospecciones de petróleo o gas con sistemas de fracking no hay más que la desesperación por continuar un modelo caduco.

No se trata de ser un ecologista convencido o no se trata de aplicar la lógica

En un futuro cercano el petróleo será tan escaso que las reservas se guardarán para emergencias, o alcanzará un precio exorbitante, lo que hará que la economía tenga una grave crisis y deba hacer cambios muy profundos para encontrar alternativas. Este proceso se supone que se está haciendo pero la realidad es que se está manteniendo artificialmente un modelo, para aumentar los beneficios, y con un coste ecológico inmenso que se ignora pero que tendrá un fuerte impacto a medio o largo plazo.

En resumen: plantearse si es realmente necesario cambiar de móvil o ignorar la moda, que pueden beneficiar económicamente y no  hay que olvidar el ejemplo de las termitas y preguntarse ¿cuando no haya mas arboles para comer, tendremos que cambiar la dieta o morir?

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.