…Fuenteovejuna, todos a una, con el permiso de Don Lope, Don Lope de Vega, todos a una es el discurso adoptado por la Comisión Europea, o por lo menos por su Presidente, Durao Barroso, que luego ya los países miembros flexibilizarán el acuerdo y ya no será Fuenteovejuna nunca más.
Todos a una, es la propuesta de la Unión Europea, una, grande y libre, como en tiempos pretéritos era España, pero Europa se rompe, está desvertebrada, cada país acepta a regañadientes y busca su propia solución más cercana a su idiosincrasia nacional.
Todos a una, los países miembros de la Unión Europea, los 27, sin excepción, aportarán la nada desdeñable cifra de 170.000 Millones de euros para el plan promulgado desde las altas instancias de la Comisión Europea, siempre y cuando estén de acuerdo, porque en nuestra Europa democrática la casa se empieza por el tejado, primero se anuncia la medida y luego ya se negociará, cosas de la alta política, supongo.
Todos a una, los otros 30.000 Millones de euros saldrán de las arcas de la Unión Europea, como organización, y como agrupación de países, que son los que, de manera indirecta, acabarán pagando esa cantidad, pero, de momento, queda derivado a través del Presupuesto comunitario y del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Todos a una, miran los estados miembros a su vecino de allende los mares, un país federal y unido, de verdad, por el hecho de ser país y no agrupación de paises, que inyectará 800.000 Millones de dólares a su sistema, no en vano ellos crearon la crisis, o al menos eso dicen.
Todos a una, Gran Bretaña reduce el IVA, Francia mira recelosa, Alemania teme por su industria automovolística y España se enzarza en polémicas fatuas sobre un puñado de acciones, cosas de la Unión.
Todos a una, Durao Barroso, nuestro Presidente, al menos sobre el papel, dice que el objetivo de la inyección es aumentar la demanda, me gusta, al menos más que las inyecciones de las vacunas, y que ese aumento se realizará a través de iversiones, inversiones en recursos humanos, en educación, en eficiencia energética y en tecnologías limpias.
Todos a una, los economistas aplauden la medida y yo me uno, me subo al carro de la ortodoxia, por una vez, y sin que sirva de precedente, vigilante pero optimista, queriendo creer pero temiendo equivocarme, temiendo por el destino final de la inyección, que pueden acabar en las arterias de la economía en lugar de en sus venas.
Todos a una, los gobiernos del G-20, más España, espero, o esperamos, el próximo dos de abril, mi aniversario, dicho sea de paso, y lo dejo escrito para que no se me olvide, volverán a reunirse y volverán a apostar por el libre mercado porque suena bien decirlo, aunque luego sus políticas sean claramente socialdemócratas, pero ¿cómo van a admitir éso ante sus electores?
Todos a una, Fuenteovejuna, Señor Juez, Fuenteovejuna mató al Comendador.