El gobierno y como cómplice, nos ha vendido un engaño manifiesto y nos ha hecho gastar, una cantidad de millones de euros, de forma absurda puesto que hoy vemos peor televisión que la que antes podíamos ver. Aquí, pues, no hay otra explicación que es la de un enorme negocio que ocultamente, han planteado los interesados (a los que habría que desenmascarar) para obligarnos a adquirir una infinidad de artilugios que no sirven para otra cosa que, para empeorar la ya deficiente y basurera televisión que en España se nos suministra; veamos hechos comprobados.
Hablas con la gente y las quejas proliferan en tal abundancia, que podemos considerarnos como estafados la mayoría de obligados a comprar unos aparatitos, que aparte de complicarnos la vida, al final nos ofrecen un suministro (servicio es algo mucho más digno) deleznable y lleno de complicaciones.
Tienes que, primero, saber programar “el aparatito”, cosa que muchos no sabemos; por tanto tienes que recurrir al técnico que si bien te lo puede programar en principio y de forma gratuita, como complemento a que le has comprado el aparato auxiliar (que te lo cobran bien cobrado: entre 35/45 euros). Pero que una vez programado y como has de emplear los dos mandos televisivos (el del aparato y el de tu televisor); ello se presta a errores y te quedas sin televisión y además, sin otra solución que llamar de nuevo al técnico para que te lo programe de nuevo. Así es que hasta que dominas ambos aparatos, pasas unas irritaciones que maldita la gana que de ellas tienes, tras haber tenido que pagar no sólo el aparato, sino también la conexión a la nueva antena, etc. etc.
O sea y en concreto, que cuando terminas te han hecho desembolsar casi cien euros, para luego ver una televisión deficiente. Cantidad a multiplicar por cada aparato que tengas; puesto que es normal hoy, el tener en diferentes lugares.
Deficiencias que empiezan en que la pantalla no se llena en algunas o muchas de las emisoras que emiten; que la regulación del volumen es otro lío, puesto que ambos mandos ya citados, pueden intervenir y ello cuesta también de asimilar; ruidos anexos que salen en algunas emisoras y que no sabes el por qué de ello; subidas y bajadas de volumen de sonido que aparecen sin tu intervenir, etc. etc.
Tan es así, que en municipios concretos y con muchos habitantes (Vélez Málaga con casi o más de cien mil según que épocas del año) su ayuntamiento, ha tenido que reclamar a las autoridades pertinentes, por las enormes deficiencias que aquí se padecen y lo que es sólo una muestra de lo que ocurre en el ámbito nacional.
¿Entonces… dónde están todas esas mejoras y maravillas que nos anunciaba el Gobierno de España y cuando nos apremiaba a comprar los aparatitos so pena de quedarnos sin ver televisión? Mentiras, todo mentiras, todo un negocio incontrolado y del que se habrán beneficiado los que sean y como sea; puesto que ya digo, no nos han sustituido un sistema de televisión malo por otro mejor, sino todo lo contrario, este sistema ha resultado infinitamente peor y lo digo como usuario, que lo padece en tres latitudes diferentes y en todas funciona mal.
Una chapuza más que hemos sufrido y pagado a un altísimo precio, los sufridos usuarios, que seguimos recibiendo en general, una televisión basura y además con todos los inconvenientes ya referidos y muchos más que se podrían agregar.
¿Reclamar… a quién? Hemos sido expoliados una vez más y con la impunidad e indefensión de los verdaderos poderes que nos seguirán expoliando cuando les venga en gana y sin explicaciones… salvo las mentiras de rigor.
Como confirmación a lo que digo, sea la prensa la que lo confirme:
“ Un 12,7 % de los usuarios dice no ver algún canal: El ministro de Industria, Miguel Sebastián, aseguraba en la puesta de largo de la TDT que la nueva tecnología era la “televisión de todos”. Le faltó añadir “de todos los que pueden verla sin problemas”. Y es que en muchos hogares españoles más de un canal funde a negro al encender el receptor. Según un estudio de la compañía de satélites Astra al que ha tenido acceso El Confidencial, el 72% de las empresas instaladoras asegura haberse encontrado con problemas de cobertura tras el apagón analógico y la definitiva puesta en marcha de la Televisión Digital Terrestre el pasado mes de abril”. (El Confidencial 02-07-2010)
Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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