Como una nave sin rumbo ni capitan, navega a la deriva en estos momentos el PSOE tras el cataclismo electoral. Uno de sus protagonistas, el limitado y oscuro ministro de Fomento, José Blanco, autor de la peor, zafia y descerebrada campaña electoral, solo aporta sandeces a modo de justificación, pretendiendo pasar por alto los catastróficos resultados cosechados por su formación política (PSOE) en las elecciones municipales y autonómicas. Alegar que la militancia socialista es víctima de una «reacción emocional» ya define por si sola al citado e iletrado ministrete. Negarse a reconocer los hechos demuestra su total incapacidad para continuar en el Gobierno, debiendo unirse al presidente en la presentación de la dimisión. Mantener a este tipo de políticos, lo único que logra es demorar la necesaria y dificil regeneración interior del Partido Socialista.
El saco de justificaciones llamado «crisis» ya está a tope y no admite más imbecilidadades. Zapatero, con su inutil tropa, ha sido castigado en las urnas merecidamente por los ciudadanos. Jamás España se ha visto inmersa en un caos económico como el que estamos padeciendo.
La prima de riesgo con el bono aleman se ha situado en 254 puntos, el nivel más alto desde enero, con lo cual, nuestro prestigio y solvencia económica está puesta en solfa. Ello implica que se cuestione si nuestro pais dispone de recursos suficientes para hacer frente al terrible endeudamiento público y privado. El pasado lunes 23, los grandes empresarios, solicitaron al presidente del Gobierno, acelerar la «Negociación Colectiva» o la disolución de las Cámaras. ¿Que más necesita ZP?.
La palabra clave para enderezar nuestro equivocado rumbo, se llama «confianza». Justo lo que nu puede ofrecer Zapatero y sus ministros. Para tomar medidas se requiere autoridad, de la que carece nuestro interino presidente. En este caso, sin director ni partitura y desastrosos músicos, va a ser muy dificil poder ofrecer un mediocre concierto en las «primarias». Ahora todo indica que intentan darle la patada democrática a la ministra de Defensa, Carmen Chacon, conminándola a que retire su presunta candidatura y quede expedito el camino al descolocado Rubalcaba, que en estos momentos no tiene muy claro como debe proceder.
El PSOE, como los restantes partidos, deberian dar paso a ciertos valores jóvenes y con gran preparación que mantienen en su filas. En el partido citado, por ejemplo, cuentan con Pedro Sanchez Perez-Castejon. Diputado por Madrid, economista, con gran formación, inteligente, moderado y constructivo en todos los sentidos. Seria un tercer candidato idoneo para presentarse a las «primarias» sin desmerecer para nada ante sus adversarios. Su único posible inconveniente es la vinculación con el ya citado al principio de esta carta, José Blanco. Circunstancia perfectamente soslayable si el contagio es superficial.
Muy pocos recordaran ya aquella mamarrachada de «La Alianza de las Civilizaciones», cuyo faro y guia era Rodriguez Zapatero en sus tiempos pletóricos, primus inter pares y galáctico como lo definia, o algo parecido, la patética Leire Pajín. No ha pasado tanto tiempo. Hoy, este coleccionista de desastres y despropósitos se ha convertido, siempre asesorado por «ese oscuro y sectario grupo que ha gobernado nuestros pais», en un cadaver político, siendo lo acertado. a la mayor brevedad, proceder a su entierro. Plañideras no han de faltarle…..