¿Qué podemos decir de un Gobierno que tenía todas las soluciones para salir de la crisis, y a sus 17 meses de Gestión, el balance es ruinoso?
Sí, deberíamos hacer un balance serio de lo que está pasando en nuestro país. Sería muy duro decir que no solamente el Gobierno está falto de liderazgo, sino que más bien, todo el Ejecutivo está falto de ideas y, en cada una de sus actuaciones, mete la pata.
Un Gobierno sin liderazgo ni apoyos. Y me da la impresión de que son tan ególatras, que ni tan siquiera desean ser apoyados, pues prefieren Gobernar por decreto, de forma dictatorial. Decía el Presidente: Como Dios Manda. Pero se olvida de que España es una democracia, mal que le pese.
El mismo Jefe del Estado, por primera vez desde la democracia, interviene en cuestiones que no son de su competencia, llamando a los Partidos mayoritarios a trabajar por la creación de empleo. Algo que el Presidente del Gobierno, utilizando la ironía gallega, rechaza sin terminar de rechazar.
El desgaste del Gobierno es tan grande que los mismísimos barones del PP se distancian del Presidente para eludir sus consecuencias. Y éste sigue con sus alabanzas a todas las medidas que rechazan los mejores economistas, y sigue manteniendo en su gabinete a un grupo de personas que no dan la talla ni como Ministros ni como políticos.
No voy hablar de los recortes de los derechos sociales que tanto nos han costado conseguir, de eso ya gritan suficientemente por las calles de toda España los diferentes colectivos, voy hablar de lo que la ciudadanía percibe como un nuevo pelotazo: la privatización de la Sanidad, simplemente porque los Hospitales concertados reclaman demasiados millones a las diferentes administraciones, además del fijo por enfermo que ya reciben, lo que hace increíble que se privatice para ahorrar.
Voy hablar de un país, considerado de servicios, que vive principalmente del turismo. El sector ha perdido 600.000 empleos y no se hace nada para remediarlo, es más se le dan millones de subvenciones a las grandes Empresas y se abandona al pequeño empresario.
Voy hablar de una banca que devora el dinero público. El saneamiento del sistema financiero español ha tenido ya un coste superior a los 100.000 millones de euros (El Estado somos todos los ciudadanos del País) y que después de haberla rescatado con el dinero de los contribuyentes, se permite pedirle créditos al BCE a 0,5% y comprar bonos del Estado al 5%.
Los viajes a Bruselas, señor presidente, son para ahondar en las propuestas del G7. Hay que realizar una reforma Bancaria que no permita semejantes desmanes.
