EL CRISOL – Pascual Mogica Costa
¿Son estos los mismos que en muchas ocasiones han pedido ver aumentado su salario y para ello han protagonizado huelgas de celo encubiertas y han provocado retrasos en los vuelos, creando un auténtico caos en los aeropuertos por el cual siempre han salido perjudicadas cientos de miles de personas? ¿Son estos, los controladores, los que piden una revisión salarial dando la sensación de que están parafraseando el lema del mayo francés del 68 “seamos realistas, pidamos un salario de ensueño”? ¿Son estos los que forman parte de una casta laboral privilegiada cuya retribución salarial era algo cuasi secreto para el resto de los españoles y que gracias a que un ministro, José Blanco, ha tenido el acierto de hacernos saber a todos la abismal y casi insultante diferencia salarial que había con el resto de los demás trabajadores incluidos los que ya de por si cobran sueldos muy elevados?
Yo he sido siempre un trabajador por cuenta ajena y por tanto defensor de que los trabajadores ganen cuanto más mejor, pero hay que reconocer que hay buenos sueldos, es lo deseable, y “demasiado buenos sueltos” que sólo sirven para que beneficien cuatro cuya función no es más importante que la de otro trabajador que esté barriendo la calle, dicho sea con todo el respeto, con una escoba. Si unos, los controladores, hacen que haya más seguridad en el tráfico aéreo, otros, los de la escoba, mantienen nuestros pueblos y ciudades limpias y en unas condiciones higiénicas sanas. Si no fuera por ellos nos comería la roña acumulada en las calles y ello afectaría a nuestra salud. Bien es cierto que en ocasiones los servicios de limpieza también nos dan algún que otro disgusto, pero sus reivindicaciones salariales nunca son comparables con los desorbitados sueldos de los controladores. No, no es malo ni disparatado el ejemplo, podría citar otras muchas profesiones que coadyuvan a que España se mantenga activa y prospere y ni por asomo, los que las desempeñan, perciben un salario comparable con el de los controladores.
Parece ser que desde el Gobierno, vía ministerio de Fomento, les han “ajustado” un “poco” el sueldo a los controladores y van a ganar “solamente” 200.000 euros al años, más de 33 millones de las antiguas pesetas, lo que equivale a casi tres millones de pesetas mensuales. No creo que se muestren disconformes con este sueldo y aunque están en su derecho, acudan a poner en práctica esas huelgas de celo maquilladas a las que tan acostumbrados nos tienen y que las llevan a la práctica cuando el movimiento de aviones es muy denso, sobre todo en Semana Santa y meses de verano, con lo cual se “jo…roba a mucha más gente, si les parece “poco” lo que ganan y más en los tiempos que corren. Ya se conformarían muchos millones de españoles en ganar el 5% de los casi tres millones de las antiguas pesetas que van a cobrar mensualmente, aunque esto sería como soñar despierto, es decir, imposible. Yo creo que el ministro de Fomento ha sido demasiado magnánimo.