Cuándo trato de entender la marcha de eso que se denomina “Humanidad”, cada vez lo entiendo menos; puesto que pareciera como si el ser humano, simplemente cambiara de vestimentas, de formas aparentes de vivir, de emplear unos u otros artilugios inventados, pero que en lo intrínseco del mismo, es igual hoy que hace milenios… “y lo mismo que un esqueleto de hace diez milenios, lo es el de hace diez años… el comportamiento de la carne que lo revistiera estuvo sujeta a las mismas pasiones, dolores o padecimientos… que padecemos los hoy vivos, como lo serán los que vivan en los próximos diez milenios”.
El progreso es en realidad “una piadosa mentira” y lo que nota el que se atreve a pensar, es que todo es como una inconmensurable rueda sideral, que van dando vueltas lentamente para regresar siempre al mismo punto de partida.
Las religiones… las buenas religiones; tratan de consolarnos y nos prometen una vida mejor, un paraíso, un futuro “en gracia de Dios”; pero lo que los cinco sentidos que aquí poseemos, nos dicen lo que arriba cito y que hago con el dolor y la impotencia, que sólo entenderán aquellos que de verdad se atreven a asomarse a, “ese insondable abismo”. Mi titular de hoy muestra una de esas orillas, que igual podría situarla en otro lugar… tristemente hay múltiples sitios donde situarse.
Pero si como afirma la noticia de donde recojo ese titular (Revista XLSEMANAL del 16-01-2011)… podemos calcular con horror; que la que se titula como “nación o faro del mundo actual”, tiene en sus cárceles alrededor o más de dos millones de condenados; puesto que si su población pasa de trescientos millones y de estos restamos un tercio que como mucho pueden ser menores de edad (muchos de los cuales estarán igualmente en cárceles para menores) la cuenta nos da esa barbaridad.
¿De qué forma se ha conformado una sociedad que arroja esas cifras tan negativas? Imposible de averiguar, pero lo que queda claro es que la educación y formación de sus niños, ha tenido que ser deplorable… sencillamente por lo que ya sentenció Pitágoras hace dos milenios y medio… “educad a los niños y no tendréis que encarcelar a los mayores”. Más o menos puesto que estoy citando de memoria.
Pero es que en esa misma nación y en el posiblemente más rico de sus Estados, cual es el de California; en la cárcel de Chino; para las esperas a las diligencias a presos, han tenido que habilitar en ciertas zonas, unas jaulas donde y como “las gallinas de una granja”, meten a los condenados, en espacios para uno, dos, tres individuos; y donde sólo pueden estar en pie o sentados. La foto que aparece en la revista citada es desoladora, puesto que aparecen una hilera de estas jaulas donde aparecen una docena de ellas; lo que demuestra que ello ya “es lo normal”.
Pero hay más; lean lo que simplemente copio, de un medio norteamericano.
“Presos condenados a muerte de Ohio ponen fin a huelga de hambre tras ser satisfechas demandas http://www.democracynow.org/es/2011/1/20/titulares#12
Tres presos condenados a muerte de la penitenciaría estatal de máxima seguridad de Ohio pusieron fin a una huelga de hambre durante la cual ingirieron solamente líquidos luego de que los funcionarios de la prisión accedieran a casi todos sus reclamos. Los presos, Siddique Abdullah Hasan, Bomani Shakur y Jason Robb, comenzaron la acción el pasado 3 de enero como medida de protesta contra lo que ellos denominan severo maltrato por aislamiento. Por más de diecisiete años han permanecido en aislamiento durante 23 horas al día debido a su participación en el motín de la prisión de Lucasville, Ohio, en el año 1993. En respuesta a la huelga de hambre, la prisión accedió a permitir a los presos visitas “con contacto a medias” de miembros de la familia, tiempo para recreación adicional, acceso a investigación jurídica por computadora, llamadas telefónicas y autorización para comprar mercaderías adicionales como comida y ropa”.
El día que esto escribo, leo la también preocupante noticia, que en Nueva York, detienen, nada menos que a 127 “angelitos” de la “Cosa Nostra”; que por cuanto se publica, son de las primeras filas de esas familias de la mafia de esa ciudad; por lo que se deduce que las ramificaciones deben ser regimientos o ejércitos… por el contrario lo que los de fuera de allí, pensábamos (ilusos); era que aquellas grandes bandas de hace ya casi un siglo y que se formaron en la “época de la ley seca”; habían desaparecido y no ha sido así, por lo que el fracaso gubernativo es notorio.
Acabo de leer un último libro, en el que se ponen “al día”, las miserias del más grande de los imperios occidentales (Roma) y puedo decirles, que según el libro afirma… nada ha cambiado, quizá aparentemente pueda parecerlo, pero no… “el progreso que nos dicen los políticos, no es otra cosa que una mentira más”.
Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen.ciudad.org (allí más)