Los domingos son dÃas ajados por la pereza, dÃas que navegan entre la paz interior de los sábados y la angustia vital de los lunes, un dÃa en el que no apetece realizar acción alguna más allá de, como mucho, lavar el coche o ir al cine, y como lavar el coche me parece de una mediocridad absoluta me fui al cine.
La cartelera tenÃa muchos tÃtulos atractivos, pero llegué tarde a casi todos y ya sólo me quedaba REC 2. La primera parte la habÃa visto en plan pirata en el ordenador de mi casa, pero no se lo digas a nadie, y la verdad es que me gustó bastante asà que ante la falta de alternativas me animé y compré las entradas para la pelÃcula de Balagueró.
Tras unos 80 minutos de metraje salà de la sala como habÃa entrado, inmerso en la pereza y con la sensación de haber tirado a la basura 7.60 euros, y cuál fue mi sorpresa al ver salir delante de mà a una niña de no más de 3 años.
Por si no conoces bien la saga REC te cuento que se trata pelÃculas de terror, con muertes por doquier, tacos que finalizan cada frase, y golpes de efecto estilo gore, vamos, lo ideal para una niña de 3 años.
¿Qué está pasando en este paÃs si una niña de 3 años puede entrar a ver una pelÃcula como REC 2? ¿No deberÃa de haber alguna ley que prohibiera estas situaciones? ¿No deberÃan de estar las salas de cine obligadas a no dejar entrar a niños a según que pelÃculas, al igual que los bares no pueden vender tabaco o alcohol a menores?
Porque está claro que los padres hacen una evidente dejación de sus funciones y se limitan a vivir sus vidas arrastrando a sus pobres hijos tras ellos. No digo que el padre de esta niña de 3 años no pueda ver REC 2, si quiere verla que la vea, pero sin su hija.
Y claro llegué a mi casa y empecé a reflexionar sobre el tipo de educación que esa niña debÃa de estar recibiendo. Seguro que la televisión era su entretenimiento, la videoconsola su pasatiempo e Internet un lugar en el que pasar el rato mientras sus padres trabajaban.
¿Qué le está sucediendo a la sociedad española? ¿No comprendemos que la educación que le demos a nuestros hijos redundará en la calidad de la sociedad que tendremos durante los próximos años?
Luego veremos en los telediarios como unos niñatos que han bebido más de la cuenta se pelean con la policÃa, o como unos ignorantes defienden posiciones fascistas, o como un chico de 20 años maltrata a su novia porque le quiere dejar, ¿de qué nos sorprendemos?
La educación de los hijos es un cuestión de vital importancia y ésta no se realiza en la escuela (donde se consigue la formación), ni en la televisión (donde se deforma la personalidad), ni en los videojuegos (donde se atrofia la imaginación), la educación se realiza en el hogar, en el hogar familiar, ya esté formado por una madre, por un padre, por un padre y una madre, por dos madres, por dos padres,…, no importa, pero un hogar familiar que comprenda que los niños están formando su carácter, su personalidad, sus aficiones, sus afinidades, y cada influencia que reciben les afectará para el resto de sus vidas.