Cultura

16 poetas,16, en la arena de Málaga

Antología de jovenes poetas malagueños

Málaga es una ciudad que pide ser leída  en clave de sol y en clave de mar. El marchamo de Capital Europea de la Cultura para 2016,  al que aspiraba, sucumbió al encanto del Cantábrico y aterrizó en esta ocasión  más al norte, en San Sebastián.

Sin embargo,  la Fundación Málaga Ciudad Cultural, antes de disolverse para dar paso a una nueva entidad, dejó tras de sí una serie de iniciativas, entre ellas, la presentación de 16 nuevos poetas. Porque Málaga no sólo se lee en clave de mar, sino también en clave de poesía.

El encargado de seleccionar y presentar a estos jóvenes poetas malagueños, es otro poeta un poco menos joven: Francisco Ruiz Noguera.  Ruiz Noguera es profesor de LingÁ¼ística en la Universidad de Málaga y ha recibido, entre otros, los premios Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez por sus obras.

Ya en su presentación del libro Francisco Ruiz habla de la relación entre la música y la palabra, recordando al lector que, en la raíz misma del término  «lírica«, está ya  implícita su fusión.

En la antología Clave de Sol 16 sobre la música, subtitulada  (jóvenes poetas malagueños), seis mujeres: Virginia Aguilar, Cristina Consuegra,  Beatriz Ros, Farrah Márquez  y Mar López Algaba,  junto a  diez  hombres, hablan, en coro de voces, de la música y de la vida.

Escribe Beatriz Ros invocando la infancia:

“El sol y yo dormíamos juntos,/ la madre nos mecía con la urgencia de siglos/ y escuchábamos su pequeñez entre los brazos.”

La música que ha calado en estos poetas, como no podía ser de otro modo, va de Bod Dylan a Billie Holiday pasando por Lou Reed o Pink Floyd, sin olvidar a Serrat, Sabina o a la mismísima Edith Piaf.

Si el oficio de escribir es duro, el de escribir poesía roza lo heroico.

Internet ha venido a ofrecer un espacio público para que proliferen grupos y grupúsculos de poetas. Pero esa libertad, que es grandiosa, llega unida a la falta de rigor, a la no existencia de criterios, ni de filtros. Aún así, que se hable de poesía, que se lea poesía, es, sin duda un regalo

Y un regalo mayor es ofrecer ámbitos de crecimiento, viveros, donde se desarrollen los que podrían ser las grandes voces del mañana.

Ninguno de los poetas recogidos en esta antología, ha sobrepasado los 35 años. Escribe Pablo Bujalance, nacido en Málaga en 1976:

«Ahora que han vaciado los túneles de hadas (…) comprendo que de nada sirvieron mis silencios/ jamás me amaste como yo amé tu rabia».

Aún más joven es Raúl Díaz Rosales, también malagueño, pero él de la cosecha del 79, que reflexiona así:

 «Ahora, sin más, lo entiendes:/ siempre será terrible que tu vida / insista en basarse en hechos reales.»

Son poesías que alcanzan una primera madurez y que prometen un largo recorrido. Álvaro Galán, otro de los poetas seleccionados,  inicia brillantemente  su poema:

» Sobre una tecla rota del piano/ el éxtasis del pájaro dormita».

Salvador Marín (Málaga 1982) invoca a Mozart:

“Viena queda a la vuelta del olvido,/y tu ángel tiene el coche preparado./ Wolfgang  está a la puerta y pregunta por ti”.

Junto a estos textos,  desfilan originales de Francisco Javier Casado, Alejandro Díaz del Pino y Diego Medina. Veamos un par de versos de Antonio Santo Orcero, otro de los autores seleccionados:

“ (…) alguien llora y sus pies clavan raíces de ron en la tierra/ un hombre dice, voy al baño a suicidarme y ahora vuelvo”.

David Leo García, Cristian Alcaraz y Alejandro Robles cierran la nómina de esta antología. Málaga puede dormir tranquila. Como siempre, tiene mar, sol y poetas para rato.

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.