En busca del dinero perdido (El Gobierno sube los impuestos)

Ahora que llega el momento de plantearse los Presupuestos del año 2010 el Gobierno español se ha dado cuenta de que no le salen las cuentas, de que tantas subvenciones, tanto plan E, y tantas ayudas a empresas con problemas provocan un agujero negro en los presupuestos estatales.

Por ello, ha querido adelantarse a la inmensidad del agujero negro y ha lanzado una serie de medidas impositivas expansivas, con el objetivo de lograr incrementar, de manera importante, los ingresos del Estado de aquí a final de año y, especialmente, durante el año 2010.

Estas medidas se resumen en tres grandes bloques:

– Incremento de impuestos sobre tabaco
– Incremento de impuestos sobre hidrocarburos
– Incremento de impuestos a altos ejecutivos

Hay que reconocer que el Gobierno ha sabido acertar con tres cargas impositivas sobre elementos con “buena prensa”, fáciles de vender a la opinión pública, con lo que no sufrirá mayor desgaste del que ya tiene.

El incremento de impuestos sobre el tabaco está siendo vendido como un esfuerzo de la Administración central para combatir el tabaquismo en España, evitando así las consecuencias nocivas de la nicotina para la salud. No dudo que esta sea una de las razones, pero la principal es el ingente incremento de ingresos que recibirá el Estado español con esta subida de impuestos.

Para los hidrocarburos han marcado una excepción para combustibles profesionales (nadie quiere volver a sufrir la huelga de transportistas del año pasado por estas fechas), y se ha centrado en los combustibles para particulares. Aunque los consumidores se puedan ver afectados por el incremento de precios que se va a generar, hay que reconocer que es una medida interesante para incentivar la utilización de transporte público, eliminando la carga de emisiones contaminantes a la atmósfera.

Y, por último, la tercera medida es de una claridad y simpleza genial. Nadie se va a oponer a una subida de impuestos a los altos ejecutivos, la cuál se realizará sobre los contratos blindados y los bonus, por lo que las consecuencias sociales serán inexistentes, mientras que el incremento en ingresos públicos será importante.

En definitiva, el Gobierno ha acertado con estas tres medidas lanzadas para encontrar el dinero que ha perdido con su política fiscal de estos últimos meses (totalmente necesaria).