Crítica de “Green Zone. Distrito Protegido”

Green Zone. Distrito protegido, cuenta la historia de un soldado que  llegará hasta donde haga falta para desvelar una conspiración que amenaza a un país inestable donde acaba de  estallar la guerra.

Estamos en 2003, y el subteniente del Ejército Estadounidense Roy Miller y su equipo de inspectores son enviados a Iraq para encontrar armas almacenadas bajo el suelo del desierto. Intentando evitar las trampas que se alzan en su camino, los hombres buscan peligrosas armas químicas, pero sólo descubren un elaborado plan para hacer fracasar su misión.

Empujado por agentes secretos con objetivos muy diferentes, Miller deberá encontrar pistas en suelo extranjero que le lleven a las respuestas necesarias para sustituir a un régimen indeseado o iniciar una guerra en una región muy inestable. Descubrirá que en una época y un lugar muy conflictivos, el arma más difícil de encontrar es la verdad.

Producida por TIM BEVAN y ERIC FELLNER, de Working Title (Un tipo serio, United 93), LLOYD LEVIN (Watchmen, United 93) y Paul Greengrass, GREEN ZONE – DISTRITO  PROTEGIDO está basada en un guión del oscarizado BRIAN HELGELAND (L.A. Confidential, Mystic River).

Para completar el elenco, se unen a Matt Damon actores de la talla de GREG KINNEAR (Destellos de genio; Baby Mama) en el papel del agente de Inteligencia Clark Poundstone; BRENDAN GLEESON (Escondidos en Brujas; “Into the Storm”, de BBC) como el delegado de la CIA Martin Brown; AMY RYAN (El intercambio; Adiós, pequeña, adiós) como la periodista del Wall Street Journal Lawrie Dayne; KHALID ABDALLA (Cometas en el cielo, United 93) en el papel de Freddy, el traductor iraquí de Miller, y JASON ISAACS (las entregas de Harry Potter, Black Hawk derribado) como el teniente coronel Briggs, un agente de las Fuerzas Especiales dispuesto a destruir la misión de Miller y al propio Miller si hiciera falta.

El director Paul Greengrass ha vuelto a recurrir a sus colaboradores habituales para el trabajo detrás de la cámara, entre los que están BARRY ACKROYD (En tierra hostil, United 93); el diseñador de producción DOMINIC WATKINS (El mito de Bourne, United 93); el oscarizado montador CHRISTOPHER ROUSE (El ultimátum de Bourne, United 93); el compositor JOHN POWELL (El ultimátum de Bourne, El mito de Bourne), y el supervisor de efectos visuales PETER CHIANG (El ultimátum de Bourne, United 93), a los que se unió la diseñadora de vestuario SAMMY SHELDON (Hellboy II: el ejército dorado, Stardust).

Crítica: Sin duda después de visionar “Green Zone. Distrito protegido”, es inevitable hacer comparaciones con “En Tierra Hostil”, película que tenemos muy fresca aun más si cabe por los recientes Oscars de Hollywood, yque a pesar de contar dos historias completamente distintas en el mismo escenario, considero que “Green Zone”, tiene todo lo que le falta a “En Tierra Hostil”, un buen guión, escenas de acción, tensión y una ambientación impresionante, que ha pesar de haber sido rodada en decorados naturales de España, Marruecos e Inglaterra, parece que han rodado la película en el mismisimo Bagdag de 2003. Y por supuesto con mensaje alto y claro, y la pregunta que todos nos hemos hecho, ¿donde están las armas de destrucción masiva, que llevaron a la invasión de Iraq y el derrocamiento de Sadam Husein?.  Y es que a día de hoy de armas de destrucción masiva, nada.

Hay que destacar la interpretación de Matt Damon, que ha punto a estado este año por hacerse con el oscar al mejor actor por su interpretación de “Invictus” y aunque breve la de  Jason Isaacs, en su papel de despiadado soldado de las fuerzas especiales. En cuanto a la dirección está claro que Greemgrass sabe entretener al espectador, creando escenas con mucha acción, introduciendo al espectador por completo en ellas y sin dejar cabos sueltos, haciendo creíble la historia que nos cuenta.

Tampoco podemos olvidarnos de la música del film que viene de la mano de John Powell, colaborador habitual de Paul Greengrass, suya es la música de El mito de Bourne, El ultimátum de Bourne y United 93.

En definitiva una estamos ante una gran película, que gustará por igual tanto a amantes del cine bélico como de acción.