Cultura

“Usuarios y Líneas de Transporte: Premio al primer lugar a la falta de Conciencia”.

A poco más de un mes del trágico accidente automovilístico de la URBAN de la Línea de Pasajes “PARÍS” misma que cubría la ruta Tlaxiaco – Putla, y quienes hasta el momento los integrantes no han afrontado sus responsabilidades. Pues al cerciorarse de lo ocurrido a uno de sus transportes desaparecieron inmediatamente sin dejar pista y huella de nadie. Tal parece que, la muerte de los pasajeros y la negligencia de los conductores no ha sido el ejemplo lo suficientemente claro para comprender que la responsabilidad delegada a un conductor automovilístico lo compromete a salvaguardar la vida de los usuarios, y que, la soberbia y la necedad de comprender la inconveniencia de exceder los límites de velocidad, la competencia automovistica y la falta de conciencia en el uso y fomento del cinturón de seguridad traen por consecuencia muertes accidentalmente trágicas. ¿Es que acaso se necesita estar al borde de la muerte para comprender lo que se dice sobre: ”tomar precauciones de seguridad en carretera”- pero tal parece que la prevención en todos nosotros nos viene importando nada. O quizás no tengamos la suficiente capacidad cerebral de comprenderlo, pareciera que colocar el broche del cinturón de seguridad fuera demasiado complicado para un humano realizar esta simple tarea.- tanto que se le dificulta aprenderlo-.

De todas las líneas transportistas de los tramos carreteros en que he viajado : de Putla – Tlaxiaco – Oaxaca, Nochixtlán- Oaxaca, Huajuapam – Oaxaca, Tlaxiaco – Chalcatongo- Yosondúa, no ha habido alguna, en el que al viajar el conductor use el cinturón de seguridad y le pida a sus pasajeros realizar la misma acción,” algunas en las que me he cerciorado al viajar como las líneas: “Excelencia”, “ Ramsa”, “Mixteca Baja“, los auto-transportes de Teposcolula”, mucho menos las líneas de autobuses ”SUR”, Transportes Turísticos de Nochixtlán , Huajuapam de León, o “ Nundeya” y muchas más que faltan por mencionar todas ellas con un grado de responsabilidad y compromiso social ponderantemente inconveniente a las medidas de seguridad.
Las líneas pretenden garantizan el menor tiempo posible de traslado al destino, que el llegar con bien a casa, me tocó observar a un conductor de cierta línea transportista a quien durante todo el trayecto hacia la ciudad de Oaxaca no hizo uso del cinturón de seguridad, si no hasta entrar a la misma Ciudad, quizá para evitar conflicto con el Transito del Estado , o por dar el ejemplo a quien le haya mirado, aunque honestamente considero una acción muy fuera de lugar- “ querer tapar el ojo con muy poca paja ”. – no sé en que estará pensando.

Algunas otras unidades más, no tienen siquiera colocados los cinturones de seguridad, de verdad que causa risa, además de ellos la sobre carga al meter más pasajeros que apenas si las personas pueden respirar, algunos hasta van parados dentro y se sujetan fuertemente en los aceros para no salir disparados por la velocidad y la inercia – . Que me dice de los supervisores de autobuses SUR , que solo suben a verificar el boleto para ver si no se adentro de colado , conveniente sería abrocharle el cinturón al despistado, vigilar que el equipaje del porta-equipaje sea exclusivamente de mano, y no como en la mayoría de los casos que me ha tocado observar , soportan maletas pesadas que por la velocidad y movimiento terminan cayendo sobre la cabeza y abdomen de un pasajero, (que por suerte no fue un niñoo un bebé) y a final de cuentas nuestra falta de observación hace que le agradezcamos al señor supervisor cuando se despide diciendo :” gracias, buenas tardes, que tengan buen viaje” yo le agradesco por el deseo más que por su inspección, sabemos lo que está pasando – pero no queremos aceptar la verdad – basta la velocidad de 10 km por hora para causarle la muerte a una persona, imagínese usted estar sentado al frente o detrás de la unidad viajando por arriba de los 80 km por hora sin cinturón de seguridad, ya puede predecir lo que pasaría si existiese un freno brusco e inesperado, salir disparado por el parabrisas, rompiéndose el cuello al instante, fracturándose la columna vertebral y morir casi al instante si tiene suerte. Y si la unidad se ha volcado, pues lo más seguro es que muera lentamente, por que en el tiempo en el que se notifica el accidente, llega la ambulancia y los Federales, más el tiempo en que lo encuentran por si la unidad cayo a más de 100 metros al barranco, pues damos por hecho usted no sobreviviría.

Esta ultima vez que viaje de la ciudad de Oaxaca a otro destino, mismas circunstancias, solo que a ésta le agregamos la participación de la Policía Estatal en una revisión justo a la salida de la Antequera, detuvo a la unidad, que por cierto ni revisaron nada o a menos que tengan escáneres en las pupilas o haya sido a la velocidad de la luz que no pude alcanzar a distinguir nada – puesto que solo miraron y preguntaron el destino. Me esperaba ejecutaran el procedimiento de revisación, búsqueda de armas o portación de drogas, muestra de identificaciones, algunas más por el estilo, en la que pensaba más era en sugerir a los usuarios colocarse el cinturón de seguridad o por lo menos al conductor, pero creo que ninguna de las anteriores era su propósito.
En las revisiones ordinarias de la Policía Federal Preventiva, como las que realiza en LA DESVIACION A TLAXIACO por la Carretera Federal, no está demás sugerirles recordarles a nuestra soberbia actitud las medidas de seguridad en carretera. La policía es eficaz en donde se lo propone, – de eso no hay duda- pero con tanto accidente automovilístico y defunciones no está demás pedirles el inmenso favor de ponernos atentos ante tales circunstancias, que por cierto hace falta la presencia de los Federales de Caminos, sobre todo en los tramos carreteros de Tlaxiaco – Chalcatongo de Hidalgo- Sgto. -“San Miguel El Grande” Yosondúa, Putla Villa de Guerreo donde se transita a gran velocidad no estaría de más su imprescindible e insustituible presencia.

Pero – ¿Quiénes son los responsables de tales negligencias?, ¿los conductores? ¿El exceso de velocidad? ¿el mal equipamiento de las unidades?¿ el no querer usar el cinturón de seguridad?¿Las dependencias Gubernamentales? Fácil; los únicos responsables somos nosotros y todo aquél que piensa que viajar sin ser precavido es tan divertido como ir a un parque de diversiones.
Por ello, y se lo digo a todos ustedes, si piensan que su vida cuesta no más ni menos de 50 a 75 pesos de pasaje, pues está muy bien si no preveen – sigan haciéndolo – pero si está usted consciente que vidas solo hay una , y que la suya es propia, única e irrepetible y que además, tiene que hacer el inmenso sacrificio de cuidarla (jajajajaja, ya para meterle drama) eso implica: si es conductor, colocarse el cinturón de seguridad y pedirle a sus pasajeros que lo hagan, mantener la velocidad y evitar las competencias con líneas paralelas, si es usted un usuario del transporte deje la pena moral – y colóquese el broche, no lo dude ni un segundo, su vida podría depender, recuérdele a su conductor lo que tiene que hacer para que nos enseñe con el ejemplo. Es de listos prevenir, suba a unidades en buen estado, no se duerma a menos que no esté sujeta con el cinturón de seguridad, lo bueno de dormir es que si se golpea no va a sentir tanto. Ya que si previno y de todas maneras no funcionó. Bueno al fin y al cabo todos de la manera que sea y cuando sea tendremos que morir, pero al menos su muerte accidental no sería por no pensar.

H.CIUDAD DE TLAXIACO/OAXACA/MÉXICO.
FENANDO SANTIAGO SANTOS.
A poco más de un mes del trágico accidente automovilístico de la URBAN de la Línea de Pasajes “PARÍS” misma que cubría la ruta Tlaxiaco – Putla, y quienes hasta el momento los integrantes no han afrontado sus responsabilidades. Pues al cerciorarse de lo ocurrido a uno de sus transportes desaparecieron inmediatamente sin dejar pista y huella de nadie. Tal parece que, la muerte de los pasajeros y la negligencia de los conductores no ha sido el ejemplo lo suficientemente claro para comprender que la responsabilidad delegada a un conductor automovilístico lo compromete a salvaguardar la vida de los usuarios, y que, la soberbia y la necedad de comprender la inconveniencia de exceder los límites de velocidad, la competencia automovistica y la falta de conciencia en el uso y fomento del cinturón de seguridad traen por consecuencia muertes accidentalmente trágicas. ¿Es que acaso se necesita estar al borde de la muerte para comprender lo que se dice sobre: ”tomar precauciones de seguridad en carretera”- pero tal parece que la prevención en todos nosotros nos viene importando nada. O quizás no tengamos la suficiente capacidad cerebral de comprenderlo, pareciera que colocar el broche del cinturón de seguridad fuera demasiado complicado para un humano realizar esta simple tarea.- tanto que se le dificulta aprenderlo-. De todas las líneas transportistas de los tramos carreteros en que he viajado : de Putla – Tlaxiaco – Oaxaca, Nochixtlán- Oaxaca, Huajuapam – Oaxaca, Tlaxiaco – Chalcatongo- Yosondúa, no ha habido alguna, en el que al viajar el conductor use el cinturón de seguridad y le pida a sus pasajeros realizar la misma acción,” algunas en las que me he cerciorado al viajar como las líneas: “Excelencia”, “ Ramsa”, “Mixteca Baja“, los auto-transportes de Teposcolula”, mucho menos las líneas de autobuses ”SUR”, Transportes Turísticos de Nochixtlán , Huajuapam de León, o “ Nundeya” y muchas más que faltan por mencionar todas ellas con un grado de responsabilidad y compromiso social ponderantemente inconveniente a las medidas de seguridad.
Las líneas pretenden garantizan el menor tiempo posible de traslado al destino, que el llegar con bien a casa, me tocó observar a un conductor de cierta línea transportista a quien durante todo el trayecto hacia la ciudad de Oaxaca no hizo uso del cinturón de seguridad, si no hasta entrar a la misma Ciudad, quizá para evitar conflicto con el Transito del Estado , o por dar el ejemplo a quien le haya mirado, aunque honestamente considero una acción muy fuera de lugar- “ querer tapar el ojo con muy poca paja ”. – no sé en que estará pensando.
Algunas otras unidades más, no tienen siquiera colocados los cinturones de seguridad, de verdad que causa risa, además de ellos la sobre carga al meter más pasajeros que apenas si las personas pueden respirar, algunos hasta van parados dentro y se sujetan fuertemente en los aceros para no salir disparados por la velocidad y la inercia – . Que me dice de los supervisores de autobuses SUR , que solo suben a verificar el boleto para ver si no se adentro de colado , conveniente sería abrocharle el cinturón al despistado, vigilar que el equipaje del porta-equipaje sea exclusivamente de mano, y no como en la mayoría de los casos que me ha tocado observar , soportan maletas pesadas que por la velocidad y movimiento terminan cayendo sobre la cabeza y abdomen de un pasajero, (que por suerte no fue un niñoo un bebé) y a final de cuentas nuestra falta de observación hace que le agradezcamos al señor supervisor cuando se despide diciendo :” gracias, buenas tardes, que tengan buen viaje” yo le agradesco por el deseo más que por su inspección, sabemos lo que está pasando – pero no queremos aceptar la verdad – basta la velocidad de 10 km por hora para causarle la muerte a una persona, imagínese usted estar sentado al frente o detrás de la unidad viajando por arriba de los 80 km por hora sin cinturón de seguridad, ya puede predecir lo que pasaría si existiese un freno brusco e inesperado, salir disparado por el parabrisas, rompiéndose el cuello al instante, fracturándose la columna vertebral y morir casi al instante si tiene suerte. Y si la unidad se ha volcado, pues lo más seguro es que muera lentamente, por que en el tiempo en el que se notifica el accidente, llega la ambulancia y los Federales, más el tiempo en que lo encuentran por si la unidad cayo a más de 100 metros al barranco, pues damos por hecho usted no sobreviviría.
Esta ultima vez que viaje de la ciudad de Oaxaca a otro destino, mismas circunstancias, solo que a ésta le agregamos la participación de la Policía Estatal en una revisión justo a la salida de la Antequera, detuvo a la unidad, que por cierto ni revisaron nada o a menos que tengan escáneres en las pupilas o haya sido a la velocidad de la luz que no pude alcanzar a distinguir nada – puesto que solo miraron y preguntaron el destino. Me esperaba ejecutaran el procedimiento de revisación, búsqueda de armas o portación de drogas, muestra de identificaciones, algunas más por el estilo, en la que pensaba más era en sugerir a los usuarios colocarse el cinturón de seguridad o por lo menos al conductor, pero creo que ninguna de las anteriores era su propósito.

En las revisiones ordinarias de la Policía Federal Preventiva, como las que realiza en LA DESVIACION A TLAXIACO por la Carretera Federal, no está demás sugerirles recordarles a nuestra soberbia actitud las medidas de seguridad en carretera. La policía es eficaz en donde se lo propone, – de eso no hay duda- pero con tanto accidente automovilístico y defunciones no está demás pedirles el inmenso favor de ponernos atentos ante tales circunstancias, que por cierto hace falta la presencia de los Federales de Caminos, sobre todo en los tramos carreteros de Tlaxiaco – Chalcatongo de Hidalgo- Sgto. -“San Miguel El Grande” Yosondúa, Putla Villa de Guerreo donde se transita a gran velocidad no estaría de más su imprescindible e insustituible presencia.

Pero – ¿Quiénes son los responsables de tales negligencias?, ¿los conductores? ¿El exceso de velocidad? ¿el mal equipamiento de las unidades?¿ el no querer usar el cinturón de seguridad?¿Las dependencias Gubernamentales? Fácil; los únicos responsables somos nosotros y todo aquél que piensa que viajar sin ser precavido es tan divertido como ir a un parque de diversiones.
Por ello, y se lo digo a todos ustedes, si piensan que su vida cuesta no más ni menos de 50 a 75 pesos de pasaje, pues está muy bien si no preveen – sigan haciéndolo – pero si está usted consciente que vidas solo hay una , y que la suya es propia, única e irrepetible y que además, tiene que hacer el inmenso sacrificio de cuidarla (jajajajaja, ya para meterle drama) eso implica: si es conductor, colocarse el cinturón de seguridad y pedirle a sus pasajeros que lo hagan, mantener la velocidad y evitar las competencias con líneas paralelas, si es usted un usuario del transporte deje la pena moral – y colóquese el broche, no lo dude ni un segundo, su vida podría depender, recuérdele a su conductor lo que tiene que hacer para que nos enseñe con el ejemplo. Es de listos prevenir, suba a unidades en buen estado, no se duerma a menos que no esté sujeta con el cinturón de seguridad, lo bueno de dormir es que si se golpea no va a sentir tanto. Ya que si previno y de todas maneras no funcionó. Bueno al fin y al cabo todos de la manera que sea y cuando sea tendremos que morir, pero al menos su muerte accidental no sería por no pensar.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.