El presidente de los Estados Unidos de América, Barack Hussein Obama, ya tiene nuevo enviado especial para el mundo islámico. El presidente nombro como consejero de la Casa Blanca al señor Rashad Hussain. La misión de Hussain “consistirá en mejorar las relaciones” con los 57 miembros de la Organización de Países de la Conferencia Islámica (OCI).
El nuevo consejero dispondrá de completo status de embajador estadounidense en el mundo islámico. Según Obama, Rashad ha interpretado un papel clave en el desarrollo de alianzas con los países islámicos desde su discurso del Cairo. Recuérdese que el presidente hizo allí un llamamiento al que denomino un “nuevo comienzo y una nueva era” en las relaciones entre los EE UU y el mundo árabe reconociendo que muchos musulmanes se han sentido objetivo de la guerra contra el terrorismo lanzada por su predecesor George W. Bush después de los ataques del 11-S. En aquellos días del Cairo, el discurso del presidente fue muy bien recibido por muchos musulmanes a pesar de que hubiesen querido una mayor precisión sobre las acciones específicas para resolver grandes problemas como el conflicto palestino-israelí.
Rashad Hussain es un joven abogado de 31 años y actual asesor del Departamento de Justicia. Hussain ha participado en la revisión de la Patriot Act, una de las normas más controversiales de la política estadounidense posterior a los atentados a las torres gemelas. El presidente Obama confía en que éste ”Hafiz” (denominación islámica a todo aquel que ha estudiado y memorizado completamente el Coran), pero particularmente ve con muy buenos ojos la amistad personal de Rashad Hussain con el historiador turco Ekmeleddin Ihsanoglu quien se desempeña desde 2005 como Secretario General de la Organización de la Conferencia de países Islámicos (OCI) y quien fuera fundador y presidente del Departamento de Historia y Ciencias islámicas en la Facultad de Letras de la Universidad de Estambul por cuyas aulas pasó Rashid Hussain.
Tanto el asesor de Obama Rashad Hussain como su ex profesor Ihsanoglu son firmantes de la carta abierta dirigida al Papa Benedicto XVI firmada por eruditos islámicos en ocasión de las palabras del pontífice en la Universidad de Ratisbona en septiembre de 2006. Otros antecedentes del Secretario General de la Organización de la Conferencia Islámica Ekmeleddin Ihsanoglu, maestro consejero del enviado del presidente Obama y quien sugirió su nombramiento al presidente de los EE.UU. es que ha sido un ferviente critico de la Resolución 1737 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que fuera emitida contra del programa nuclear de Irán en 2008 y mas recientemente, junto al vicepresidente del partido Baaz sirio, el Sr. Faruk Al-Shara, ratifico el derecho de Irán a acceder a la tecnología nuclear para fines pacíficos recordando que ello ha sido respaldado por la Organización de la Conferencia Islámica en general y por él en particular.
Pero un detalle no menor es que en noviembre de 2009, Ekmeleddin Ihsanoglu ha tenido declaraciones en las que enfatizó que “las consecuencias de impedir a la Republica Islámica de Irán su desarrollo pacífico nuclear serán impredecibles y con gravísimos peligros para la paz y la seguridad internacional” y advirtió que “ello es una manifestación clara de islamofobia que no es más que discriminación racial”. Ante este grotesco, uno debería preguntarse: ¿El Islam es una raza?
El señor Rashad Hussain ya ha sido presentado en Washington como el hombre de confianza del presidente Obama ante los países islámicos. ¿Hussain pensara igual que su maestro Ekmeleddin Ihsanoglu?
