Cultura

Piratas y pateras, de Vicente Boix

Pequeños agricultores lograron sobrevivir y progresar, aunque con las políticas neoliberales, la agricultura tradicional y campesina ha entrado en recesión. Las exportaciones y las importaciones agrícolas se multiplicaron, lo que muestra que el modelo agrícola exportador e intensivo está expulsando a los agricultores del campo.

Piratas y pateras

Piratas y paterasInteresante reflexión sobre el acaparamiento de tierras en África en el que se aportan abundantes datos para entender este fenómeno: perfil de los nuevos inversionistas agrícolas, tipo de cultivos que siembran, efectos en la seguridad alimentaria en la región, impactos y abusos sobre la población local y el medio ambiente, consecuencias en la agricultura española o europea.

Los intereses económico financieros, se han ocupado de la cadena agroalimentaria para convertirla en un gran negocio; controlado por ellos. Lo prueban los balances de opacas compañías transnacionales así como el incesante aumento del capital financiero en mercados de materias primas. Para los inversionistas el futuro les parece prometedor pues la gente puede dejar de pagar su hipoteca pero siempre tendrá que alimentarse. Además se ha aceptado como normal el incremento de los precios de los alimentos (y su volatilidad) que se creó artificialmente en los mercados. Desde organismos como la FAO se anuncia que la humanidad enfrentará una época de alimentos caros aunque ello suponga aceptar un status quo en el que millones de personas pasan hambre.

Parece que el equilibrio entre oferta y demanda de alimentos y materias primas agrícolas se comprimirá si no se toman medidas, porque la población mundial sigue creciendo de forma exponencial, y porque el futuro energético de muchos países puede depender de los agrocombustibles. Nuestro planeta está padeciendo un cambio climático que compromete la capacidad hídrica de muchas naciones, degrada los suelos, alteran la productividad y afecta los rendimientos en diversas zonas de cultivo.

En tiempos de crisis económica y recesión, la agricultura se presenta como un mercado de futuro prometedor. La demanda está asegurada, y seguirá creciendo por la suicida explosión demográfica, el arma más peligrosa de destrucción masiva.

La oferta es el objetivo a compartir y por eso inversionistas y transnacionales extienden sus tentáculos, ya que ciertos eslabones de la cadena alimentaria exportadora ya están acaparados por multinacionales (semillas, intermediación, etc.), para conquistar la tierra mediante su adquisición en los más diversos lugares del planeta. Ya causan escándalo la compra de millones de hectáreas de las mejores tierras en Latinoamérica y África por parte de compañías de China, India y ricos países de Medio Oriente. Esta es la gran amenaza para la autosuficiencia alimentaria, sobre todo en pueblos empobrecidos que necesitan para subsistir los productos locales que cada vez les van arrebatando con la complicidad de “gobernantes” corruptos y corruptores que no conocen ni respetan fronteras ni los más elementales derechos de las personas.

J. C. Gª Fajardo

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.