En la Antigüedad, el conocimiento, los libros o papiros, estaban reservados a una élite que dominaba a una mayoría, que era analfabeta y no podía acceder a la información. Pero esa mayoría era relativamente feliz en su vida, ya que desconocía la realidad, y de ahí el titulo de este artículo.
Foto: Daquella manera
Hoy en día, en la sociedad actual, la gran mayoría de la población de países occidentales sabe leer y escribir, al menos, dándole la oportunidad de acceso a la información. Pero en un mundo en el que existen multitud de medios de información e Internet, la información que se ofrece es censurada de una u otra forma. Si bien se supone que existe libertad de expresión, hay asuntos sobre los que empresas, gobiernos, etc. vetan o al menos no desean ofrecer la realidad y dan una versión parcial. El último ejemplo es la coacción que Israel hace a determinados periodistas que difunden una versión distinta a la israelí sobre el conflicto en Gaza.
Pero no solo existen muchas realidades que se desconocen hoy en día, así ha sucedido también a lo largo de la historia. Por ejemplo los cristianos en la Roma antigua tenían como símbolo un pez (símbolo de la vida, comida y porque muchos apóstoles eran pescadores) pero con la fundación de la Iglesia católica de Roma, se impuso una cruz (símbolo de muerte, castigo y como aviso para quienes traicionan u ofenden a Roma) y esto es historia pero no es lo que se ofrece a la mayoría de la población.
Como este hay multitud de ejemplos:
- Que España no entró en la Segunda Guerra Mundial porque Hitler o Alemania no quisieron ya que existía un compromiso firmado por Franco, por imposición de Hitler, que obligaba a ello, pero eso se ocultó al pueblo y pensaron que había sido porque Franco quería evitar mayor sufrimiento al pueblo español…
- Existen múltiples datos sobre la familia Rotschild que sorprenderían, pero no es posible detallarlos aquí, aunque podemos decir que, a principios del siglo XX, su fortuna se calculaba en el 50% de la riqueza mundial y a día de hoy no existen datos, pero sin embargo no aparecen por deseo de ellos. La realidad es que poseen 3/4 partes de la riqueza mundial y control sobre el 25% restante, siendo los más ricos del mundo, casi en un monopolio. Esto es solo la punta de un inmenso iceberg ya que hay que apuntar que son hebreos o judíos (askenazí o ashkenazí no de Israel sino europeos) además de sionistas que controlan el poder en Israel y a distintos niveles en todo el mundo.
Existen muchos datos curiosos y reales como estos pero, ¿qué prefieres? ¿ser ignorante de ello y feliz relativamente o saberlo (para padecer la impotencia de no poder cambiar nada) y ser infeliz relativamente?
Este es el motivo del título.
