Los que conocen a Beatriz Goyoaga dicen que es una fuerza de la naturaleza. Y viendo su biografía no cuesta mucho creerlo. Esta reportera, corresponsal del Daily Mail en el Cono Sur, ha sido una viajera impenitente que lo mismo ha subido al Himalaya, que ha atravesado Africa en camión, o se ha pasado una temporada con los aborígenes australianos. Su carrera profesional encontró un punto de inflexión cuando oyó una conferencia que dictaba un pensador hindú de nombre largo y larga barba: Sri Sri Ravi Shankar.
Ravi Shankar, es asesor de la Universidad de Yale y ha sido invitado especial de Naciones Unidas; pero su gran obra es una ONG llamada “El arte de Vivir”, que es una de las mayores del mundo, con presencia en más de cien países. Sus cursos han llegado ya a veinte millones de personas. Ravi Shankar dice que existir es un hecho, pero vivir es un arte.
Lo que “El Arte de Vivir” ofrece es una fórmula sencilla de yoga basada principalmente en técnicas respiratorias. El ritmo respiratorio se modifica con los estados de ánimo. Los programas de “El arte de vivir” ofrecen una herramienta para manejar el estrés y solucionar los conflictos.
Beatriz Goyoaga ha cambiado su oficio de escribir por el de comunicar lo que podría llamarse el arte de respirar. “Cada individuo, dice, puede controlar su nivel de estrés con su ritmo respiratorio y la profundidad de su inhalación y exhalación. En un estado de meditación profunda las respiraciones por minuto son tres o cuatro. Una mente alterada y nerviosa pasa de los 20 o 25”. Beatriz acaba de pasar por Madrid para hablar de “Á‰xito sin estrés”
Por favor, defina éxito. Á‰xito es cuando eres capaz de sonreír a pesar de las circunstancias. Hoy la gente llama éxito a tener dinero en el banco o a tener reconocimiento social y muchas veces el éxito consiste en gastar toda la salud para ganar mucho dinero y después perder el dinero para recuperar la salud.
De todas las necesidades de occidente, “El Arte de Vivir” ha elegido actuar sobre el estrés. ¿Por qué? Una mente estresada, no puede ofrecer los valores que son la meta ideal de toda sociedad. Una mente estresada no puede tener compasión. Una mente estresada no puede ser buen amigo, una buena madre, no puede expresar su amor. Antes de dar los valores, tenemos que poner a la mente en un equilibrio. Hasta el más santo, cuando está fuera de su centro, ladra en vez de decirte la hora que es.
Ha escrito para el Daily Mail y del Sydney Morning Herald, ha sido corresponsal de guerra, ha escalado dos veces el Everest, y todo eso buscando ¿qué? Yo en realidad no buscaba más que lo que me proponía la vida; me he dejado llevar por la marea, han sido verdaderamente cosas fascinantes…, pero yo puedo decir tranquilamente que ninguna de esas cosas que yo he hecho, que suenan a película, me han dado la satisfacción que me ha proporcionado el hacer algo por una persona sin esperar nada a cambio. El ir a una cárcel, por ejemplo, dar un curso y que los presos o las presas me digan: “Me siento libre, eres mi mejor abogada”.
Ha pasado temporadas con los beduinos, con monjes en el Tibet, con aborígenes australianos, ¿y no buscaba nada? Conscientemente no buscaba nada, tal vez inconscientemente buscaba a mi maestro. Un día encontré mi guía y mi rumbo y todo ahora se vive a través de ese guía y ese rumbo.
¿Cuándo fue? Hace doce años fui, con mi pareja, a una conferencia que daba Sri Sri Ravi Shankar. Hizo una meditación guiada y no tuve grandes experiencias, pero sentí un gran relax, que hizo que se me soltaran los “nudos” del cuello. Yo tenía el cuello como un rosario. Al día siguiente volvió la tensión, pero busqué más y me encontré con los libros, con los cursos de Ravi Shankar. Y años después de hacerlo para mí misma, me di cuenta de que estaba sentada sobre una herramienta magnífica, mientras mis amistadas estaban tapando sus problemas con el vino, o con los psicofármacos. Y pensé en transmitirla.
Y en este momento se ocupa de la difusión de “El Arte de Vivir” en Argentina Ya no sólo en La Argentina. Hay sedes de “El Arte de Vivir” en toda America Latina. Yo sola he dado el curso a más de 20.000 personas, ahora estoy yendo a otros países para ver si podemos transmitir serenidad.
Las herramienta sirve para todos los estratos sociales ¿desde la cárcel a los Consejos de Administración? Si, la idea es recuperar el equilibrio psico- físico. Yo antes de tener la mente sana, tenía el sistema inmunológico por el suelo, todos los médicos me decían: “Hay que relajarse”. Y yo contestaba: “Bueno, pero ¿cómo?” Nadie quiere renunciar a sus actividades, a sus cosas, y encontré la herramienta en la respiración
¿Y eso es lo que ofrecéis? Sí, encontrar una fórmula de equilibrio sin medicamentos, sin terapia, simplemente usando el remedio más barato del mercado que es la respiración.
Beatriz Goyoaga ha empezado a redactar sus memorias. El título es sugerente: “Del gin-tonic a la meditación”. A veces, para llegar a lo simple hace falta realizar un largo recorrido.