Posiblemente no exista nada más triste para una comunidad, región o territorio, en el que sus ciudadanos carezcan de expectativas y condenados a vivir muchos de ellos, prácticamente en el umbral de la miseria y con escasas posibilidades de futuro, tal como es el caso de Andalucía con un 36% de paro y en alguna provincia superando el 40%, gobernada hasta el momento por José Antonio Griñán, quien presentó recientemente su dimisión por cansancio político, si bien nadie ignora que el cese voluntario obedece a su vinculación con el caso de los ERE y posible imputación. Personaje, por cierto, a quien le cabe el alto honor de pasar a la historia como el campeón del desempleo, abandono escolar, enchufismos y presuntamente vinculado a corrupciones varias.
Chaves, Griñán y los ERE,s… ERE que ERE!!Para mayor escarnio, este nefasto político, tuvo la feliz idea de nombrar a la consejera Susana Díaz como futura presidenta de la Junta de Andalucía, a través de un patético e impresentable montaje de primarias propio de república bananera. Según cuentan quienes la conocen bien, su única meta en el seno del partido, siempre fue sumar poder a cualquier precio, hundir a todos los que le hacían sombra y dar coba a sus superiores, todo ello auspiciado y apoyado por el autodimitido Griñan, aspirante a seguir controlando a los andaluces a través de su protegida No obstante, la experiencia nos dice que nunca apadrinamientos de este tipo han funcionado, dado que el promocionado, acaba creyéndose el papel y termina rompiendo con su mentor.
La osadía de la citada Susana, cuyo nivel cultural viene avalado por diez años de esfuerzo para lograr una licenciatura en Derecho, alcanza cotas sonrrojantes. Concretamente, en su discurso de investidura en el Parlamento Andaluz, se permitió la licencia de afirmar que «me avergÁ¼enza la corrupción. Rechazo tanto la complicidad como la tibieza hacia ella y prometo combatirla sin descanso«, y todo ello sin hacer a lo largo de su leída intervención, ni una sola referencia al escándalo de los ERES. Tal omisión constituye una desfachatez suficiente para ser descalificada y declarada inútil para cualquier cargo. ¿Cómo es posible hacer gala de semejante cinismo? Según parece, su pretensión es obviar todas las barbaridades cometidas por ciertos dirigentes de su partido, algunos de los cuales ya han pasado por la cárcel y otros muchos que, imputados por el mismo motivo, podrían terminar en el mismo sitio….. Intentando dar a entender que con ella se parte de cero como si nada hubiese ocurrido.
Si en efecto está dispuesta a legitimarse en su digital nombramiento y otorgar carta de naturaleza a esa encomiable promesa de combatir la corrupción ya le sobra tarea. Por ejemplo: ¿tiene previsto investigar los fondos de formación de la Junta que UGT, el sindicato amigo, presuntamente se gastó en pancartas, autobuses, comidas, cenas, francachelas, etc.? Lo lógico sería que en su condición de máxima autoridad de la Junta actuase diligentemente y prestase toda tipo de colaboración a la Fiscalía.
Como quiera que aquí el mas tonto hace relojes y en política tambien ocurre, ya saltó a la palestra Elena Valenciano, quien emulando a la inefable Leire Pajín con su «encuentro planetario entre Obama y Zapatero«, ha asegurado que la intervención de Susana Díaz debe ser considerada como «El primer discurso del Siglo XXI«.
Es cierto que la chapuza política forma parte del patrimonio español, si bien, en alguna regiones como en el caso Andalucía y Cataluña, provocado por el comportamiento de sus políticos, alcanza niveles que superan todo lo imaginable…y los andaluces, dotados de una enorme capacidad de trabajo, imaginacion y sociabilidad inigualables, no merecen el tratamiento que están recibiendo por el torpe interés y desafortunadísima gestión realizada por sus políticos.
Como se apuntó al principio de esta carta. Andalucía viene soportando 30 años una inmerecida crisis social y económica de considerables proporciones y ocupando un lugar que no le corresponde, pero con el último y desdichado nombramiento, no confundir con elección, fácilmente podemos llegar a los 50. Esperemos que todo lo que está ocurriendo sea un mal sueño, pase pronto, y al despertar, surja alguien cargado de expectativas y nobles intenciones que nos permita pensar que pronto tendremos derecho a trabajar, vivir y ocuparnos de los nuestros.