Curiosa creencia esta de los católicos de honrar a sus muertos con coronas de flores en sus tumbas, ¿a quién se honra? ¿Al muerto que yace bajo tierra y no verá las flores o al resto de la sociedad que verá lo que se quería al muerto? Vaya usted a saber, ¡ah, no! Es que al morir subimos al cielo y desde allí lo vemos todo, pero ¿dónde está el cielo? En otra galaxia, debe de estar muy, pero que muy lejos, porque cada vez descubrimos nuevas galaxias y nada, que no somos capaces de dar con el demiurgo de todo esto, ¿será que se esconde? ¿Por qué? ¿Hizo algo malo? ¿Sólo se le conoce la construcción del mundo? Puede que hiciera otros anteriormente y tema que nosotros también le reprochemos lo que hizo, vaya usted a saber, eso ya lo he dicho, bueno, tengo libre albedrío y digo lo que me viene en gana, ¡faltaría más!
Y todos como borregos a acudir al cementerio, ¿por qué hay gente que sigue enterrando a sus muertos? ¿Qué creencia puede haber detrás de ello? No los incineran porque sería mancillar su cuerpo, ¿hay peor mancillación que ser devorado por un ejército no organizado de gusanos? Si al menos estuvieran organizados, no sé, ¿cambiarán la hora los gusanos? Te aviso porque mañana se cambia la hora, que no sé si te habías dado cuenta, pero me estoy yendo, me estoy yendo del tema en cuestión.
Algún día España dejará de celebrar las fiestas religiosas, espero vivir para verlo, y comenzaremos a celebrar las fiestas de verdad, esas fiestas que conmemoran momentos históricos, como el día de la Constitución, eso es una fiesta de verdad, o el día en el que el Madrid ganó la séptima, bueno eso sería muy particular mío, el día que ganamos el Mundial, eso sería más global, el de fútbol, quiero decir, que lo aglutina todo, lo bueno o lo malo, o el día que nació Rubalcaba, por ejemplo, que parece ser el totem de la política española, no sé, cosas con enjundia y no el día de todos los santos, pobres santos, demasiado tienen con haber estado toda la vida haciendo el bien, que si milagrito va que si milagrito viene, ya están cansados los pobres, dejémoslos en paz.
Pero te estaba hablando de ir al cementerio, que me desvío, todos en santa procesión, como no, el día señalado a mostrar cuanto querían a los que se fueron, como si a estos les importara, hay que querer en vida, no en muerte, es fácil querer en muerte cuando se sabe que ya no hay que aguantar, la vida, el día a día, hay es donde hay que respetar, admirar, querer, todo lo demás es una pura pantomima sin solución de continuidad.
Mis muertos, muertos están, les quise en vida, o no, depende del caso, pero no les quiero más o menos por ser el día de todos los santos, demasiados días nos imponen ya las grandes superficies para que sigamos manteniendo los días que heredamos de nuestro pasado religioso. ¡Basta ya de fiestas religiosas! Voy a abrir un grupo en Facebook, ¡a ver quien se apunta!