El pasado jueves el público alemán tuvo la oportunidad de conocer al autor y realizador Santiago Lorenzo que inauguraba con su largometraje Un buen día lo tiene cualquiera el nuevo ciclo de películas sobre la comedia y el humor español que presenta el programa cultural del Instituto Cervantes de Bremen (Alemania).
Sin embargo, no todo el público presente era alemán, algunos españoles también acudimos para conocer un poco más de cerca a los nuevos realizadores del cine español.
Cuando vi “Un buen día lo tiene cualquiera” pensé en seguida en las palabras que una vez escribiera Chabrol sobre su propio trabajo como realizador: “Yo intento simplemente ofrecer al espectador una historia lo más comprensible y sencilla posible”. Esto último parece adecuarse muy bien al cine de Santiago Lorenzo que con historias sencillas sabe llegar a un público con algo que no es tan fácil de conseguir: una mezcla de tonalidades que se mueven entre la precariedad de los personajes y un humor alentador. “Mucha gente que ha visto Un buen día lo tiene cualquiera se ha sentido muy identificada con la situación precaria del protagonista y con la idea de estudiar oposiciones como única salvación (…) la película habla de cuando uno pierde los papeles y empieza a hacer algo a lo que no está llamado a hacer (…) Uno tiene que ser siempre uno, para lo bueno y para lo malo, aunque sea un argumento muy de Hollywood, yo así lo creo” contaba Santiago Lorenzo al público asistente.
La película que se estrenó en el verano del 2007 supuso una inolvidable experiencia para el realizador vizcaíno: “Fue un rodaje muy sencillo porque el equipo era fantástico…me acuerdo de los nombres de todos y cada uno de ellos (…) la ciudad de Valladolid se volcó con el proyecto. Fue muy emocionante a todos los efectos, todo el mundo ayudó y el equipo de Madrid se portó fantásticamente. La rodamos en seis semanas”
El público alemán coincidía, en el debate que surgió después, en que muchos de los temas de los que trata la película también se dan en la Alemania actual, “sin embargo un alemán no sabría reír tanto y tan fácilmente sobre ese tema” (…) “la manera en la que los españoles tratan todo esto nos conmueve”, comentaba una asistente.
Sobre el reparto de la película y más en concreto sobre el papel que interpreta Juan Antonio Quintana nos decía Santiago: “es un inmenso actor, sobretodo de teatro. Yo le había conocido hace unos 20 años y la verdad es que a mi me parece prodigioso (…) yo tenía la impresión de que iba a ser el hombre adecuado, pero habían graves problemas porque en España las televisiones son las que financian las películas y estas no suelen querer a actores nuevos. Me propusieron actores que estaban bien, pero me daba la impresión de que nunca había visto este papel en una película y no me gustaba la idea de que fuera un actor conocido y de toda la vida quien interpretara este papel (…) los actores interpretaban con una mezcla de gravedad y diversión”.
En la actualidad Santiago Lorenzo está más centrado en la escritura y tiene en preparación un libro que se publicará en el verano próximo.