Fallece el escritor y periodista cubano Juan Arcocha en su residencia de París. Arcocha tenía 83 años de edad y desde 1971 se había desligado definitivamente del régimen cubano, permaneciendo en su exilio parisino desde entonces. Sus familiares y allegados comunicaron ayer, 8 de mayo, el triste fallecimiento de este importante escritor y periodista.
En España se han publicado las obras: «žPor cuenta propia, La bala perdida, Operación viceversa, Tatiana, los hombres abundantes y el tiburón vegetariano.”
Debido a su dominio de idiomas, Arcocha trabajó muchos años de intérprete en algunos organismos internacionales, como por ejemplo: la UNESCO y la ONU. También acompañó y fué intérprete de Sartre y Simone de Beavoir en su primer viaje a la Habana.
Su labor de periodista le llevó a ser corresponsal del periódico «žRevolución“ en Moscú y a trabajar en la embajada de Cuba en Francia, pero a finales de los años 60 se sintió decepcionado del rumbo que tomaba la «žrevolución“ cubana, rompiendo definitivamente con esta a comienzos de los setenta, en solidaridad con el poeta Heberto Padilla, gran amigo suyo.
(Fuentes: The Miami Herald, AFP, Zoé Valdés 8 /5/2010)
El caso Padilla
El llamado caso Padilla, en 1971, supuso la cisura entre la intelectualidad izquierdista y el régimen comunista de Fidel Castro, por el injusto encarcelamiento que sufrió Heberto Padilla, poeta cubano muy querido.
El caso Padilla se originó en la publicación , en 1968, del conjunto de poemas «žFuera de juego“. A pesar de que el poemario de Padilla obtuvo el galardón literario cubano que concede la Unión de Escritores y Artistas Cubanos, su publicación desencadenó el encarcelamiento de su autor, debido a las críticas a la revolución castrista que este poemario contenía. Padilla fué torturado y obligado a retractarse de sus escritos.
Este suceso provocó la reacción de numerosísimos autores, artistas y pensadores occidentales que escribieron una carta en contra, exigiendo la libertad de Padilla. Entre estos autores figuraban, por ejemplo, Pasolini, Sartre, Duras y Cortazar. Pero fueron muchísimos más los que firmaron y apoyaron esta carta. Finalmente la presión internacional obligó a Castro a liberar a Padilla de la prisión.
Fuentes: La Vanguardia digital 27/09/2000