por Roberto Carlos Miras
«La música, es el mejor medio para despertar el alma, el camino más directo hacia Dios, une al Hombre con Á‰l, y al Hombre con el propio Hombre, la música es el lenguaje del alma» Así escribía, Fernando Díez, lo que para él, era la música, o por lo menos, uno, de sus muchos significados. «La Sitar,es un instrumento mágico y sotistificado; no existe otro más bello que la Sitar. Esta confeccionado con elementos simples: su caja de resonancia, es una calabaza natural, recubierta de madera, y sin embargo, es uno de los medios más adecuados para alcanzar el equilibrio interno del cuerpo y alma» añade Fernando. La India, al fondo, un público, en silencio. Quizás al hombre, le falta eso mismo. Escuchar en silencio.
P- Fernando, cuando comencé a leer tu libro «La India, historia de una búsqueda» me llamo la atención su primera frase: «Siempre supe que alguna vez tendría que contar esta historia» ¿por que?
R- Probablemente, por que el ser humano, es un ser social. Cuando sabe algo, da la impresión de que estamos hablando de un instinto de la naturaleza. Al saber algo, la naturaleza del ser humano es la expansión. Viajar, al fin y al cabo es conocimiento. Sí en un momento determinado has tenido una serie de experiencias, también en el fondo esperas un reconocimiento.
P- Fernando – insisto-, una vida de asceta, una persona totalmente integrada, durante doce años en la India, que se dice pronto, marchas en pleno movimiento hippy. ¿No es algo personal, algo de uno mismo?
R- No es punto importante, ni mucho menos, es una consecuencia lógica, sino lo publican, no pasa nada tampoco. No escribes para contarlo, si no se publica, pues, no pasa nada. Escribo por una necesidad de expandir, de escribir. Y si luego se publica, pues mira…
– Reflexiona un instante:
-El hecho de publicarlo es consecuencia de un desarrollo, de un proceso. Con la música pasa algo parecido. En mi caso he tocado tantas horas, necesitaba como digo: recuperar y vivir de ello. Escribir es también poder vivir de algo que es tuyo. No tener que hacer cosas que no te divierten. poder vivir como te digo de algo que es lo tuyo.
P- He leído algunos artículos tuyos en donde hablabas del Yoga y ciertas terapias como un medio, pero reflexionabas y decías que el verdadero Yoga con mayúsculas es la vida.
R- Son herramientas, Roberto, utensilios, que te buscas para poder llevarlos con dignidad. Probablemente, la Vida es el Yoga fundamental, el más complicado, y es el mismo camino. Las distintas filosofías, tu deber, tu karma, son medios y el fin del camino real es la vida.
P- ¿Y en este punto?
R- Es donde podemos hablar de los fines que buscas para poder llevarlos con eficacia. Camino hay más que uno. Ya sabes, que la felicidad que puedas o no tener, es la que tienes en tu entorno. No puedes ayudar a los negritos de África, sí tienes, chapuzas en tu vida.
P- La India, hablemos de ella. ¿Alguna vez, has echado la vista atrás?
R- Sí, por que ha sido la época más bella de mi vida, más hermosa, más atractiva, más intensa. A veces, te preguntas, sí aquello fue un sueño, los bosques, Benarés, o el Ganges, en un ambiente en que todos son ascetas, son santones. Me divierte muchísimo el recordarlo, pero no con nostalgia, sino con satisfacción de que has realizado un trabajo.
P- Esa India lejana en el tiempo, es la misma que nos quieren vender ahora.
R- Aquí el Yoga es una cosa, y en la India es otra cosa. Hablamos aquí de un texto del siglo XV – XVI que es el Hatha Yoga Pradipika. En los siglos II- III antes de Cristo es cuando surge el Yoga de Patanjali. Pero si me preguntas, ¿cual es la base del Yoga? El adiestramiento ético. Tu no te puedes poner a meditar, a concentrarte, sí tienes la vida desordenada; la meditación, sin sentimiento es inútil, bajo mi punto de vista.
P- ¿Y la existencia?
R- La existencia esta basada en dos cosas: Consciencia y Energia. El hecho de sentarse a meditar con consciencia y voluntad es una parte, le falta el elemento energético, la euforia mística, ese sentimiento…El sentimiento devocional y la consciencia mística, no la consigues por mucha práctica de Yoga que hagas. La consigues como un producto de transformación de la mente.
P- ¿Y como viene- Fernando-, esa transformación?
R- La transformación de la mente viene simplemente tras conocer la hibridad de todas las cosas. Cuando tu comprendes que todo lo que te rodea es Dios, todas las manifestaciones son puro panteísmo. Tu prefieres a Dios en todas las partes, con ese cariño. Sin devoción, el camino espiritual se hace muy difícil.
P- Explicas en el libro «He meditado durante muchas horas y he practicado Yoga, durante muchas horas» pero te has quedado con la música ¿Por que?
R- Es que la música, ya os lo contaba anoche. La música te obvia. Para enfrentarte al sentimiento devocional, la música es como un soporte de la meditación, pues te puede llevar a ese aislamiento tan necesario que despierta la devoción. Devoción y Amor universal, son prácticamente lo mismo.
P- ¿Que es la música, Fernando?
R- Es un pequeño atajo, hacia ese sentimiento devocional, que te despierta y que un objeto cualquiera, una vela, una imagen, dependen en este caso de su idea religiosa. La devoción es la energía fundamental para que la consciencia se eleve. El problema, aquí Roberto, es elevar la consciencia. Una cosa es sentarse a meditar, parte fundamental, pero, hay otra cosa que es un flujo de energía, de sentimiento, que te eleva.
– Has publicado “Física Mística” y el libro anteriormente mencionado, “Varanasi” Me gustó más Varanasi que“Historia de una búsqueda” En una de sus paginas en Varanasi, hablas de Amor y de que hay que dar Amor a los demás sin esperar nada a cambio….
– Me contesta rápidamente:
– La vida espiritual sin devoción es una utopía. Es imposible.
P- Pero, no crees que mediante la meditación, utilizando el Bhakti Yoga (Yoga Devocional), también se puede llegar. ¿No es así? Un caso: Ramakrisna, que es un Bhakti Yoga, ¿no?
R- Ramakrisna, que es un tántrico. Al hablar de tantrismo, hablamos, de Amor y Devoción. El percibir amor en todas las cosas, es la consecuencia directa de percibir a Dios, en todas las partes. La esencia del ser humano es el espíritu Atman. Estamos hablando de una estructura lógica del cerebro que se corresponde con la estructura morfológica del universo. Todos somos Dios.
P- ¿Que quieres decir?
R- Cuando eliminas las impurezas, mediante la vida ascética, mediante la devoción, desaparece luego la cáscara, y, surge luego, la esencia interior. Atman es igual a Brahma.
P- Fernando y el ego. ¿Es fácil que desaparezca?
R- El ego nunca desaparece, el ego hay que conducirlo, el ego nunca puede desaparecer. Hay que intentar que tus intereses no trastoquen el normal curso de las cosas. Se puede llevar una vida normal y sin embargo no tener ego. ¿Cuando? me preguntaras. Cuando tu no actúas en virtud de los resultados, solamente en virtud del deber. Es la esencia de la Bhagavad – Gita.
P- ¿Del deber?
R- Cualquiera que sea. Dice la Bhagavad Gita «No actúes, que el deseo de tus buenos actos, te lleve a la acción, pero tampoco a la inacción» Es una frase de una sabiduría alucinante, lo cual quiere decir, que tienes que hacer, lo que tienes que hacer, y no pensando en los resultados.
– Una reflexión… y Fernando Díez, sabe lo que tiene que hacer…
– Sí, llevo treinta años dedicado.
P- Tu primer libro «Física Mística»…
R- Es el primer libro que escribí. Lo escribí a borbotones acababa de llegar de la India, y venía todo… Es un libro como dices, de Física Cuántica, abordo en él, el tema de la física y de la mística. Entre ambos temas existe una relación muy directa. Una parte importante es el tema de las gunas. Relaciona, la estructura física, de la estructura mística. Tenemos que tener en cuenta, que para el Hinduismo todo es panteísmo, básicamente, entre está taza y yo, no hay ninguna diferencia, simplemente, que la evolución me ha hecho desarrollar un cerebro. Prácticamente es lo mismo.
P- ¡Lo mismo!
R- Sí, todo depende de lo que has evolucionado. Te permite captar de ese inmenso océano de consciencia, una cosa u otra. Por ejemplo, la energía que entra en una casa, esa energía eléctrica es la misma. Ahora una cafetera o un ordenador de última generación, esa maquina no sofisticada es simplemente un ente material. Los elementos que ha desarrollado como producto del devenir son superiores.
P- ¿Y el cerebro?
R- A eso iba, puede captar muchas más cosas. En esencia no hay nada, el ego es como una botella. El aire es como una botella, es idéntico al aire de fuera. El aire de dentro es Atman y la botella es el ego. Cuando rompes la botella, rompes el ego. Rompes la botella y el espacio interior y exterior es lo mismo, no hay diferencia, es la liberación.
P- Se conoce a Benares por la muerte. ¿Y en tu caso?
R- Es un cambio de nivel de consciencia. Ya lo dicen muy claro Las Upanisad y La Bhagavad – Gita «Nada nace, y nada muere» Lo que ha nacido, no puede deja de existir, y lo que muere no puede nacer.
P- ¿Que piensa realmente el hombre? Dejemos a un lado estos libros sagrados que tu has mencionado. ¿Qué piensa el hombre Fernando?
R- Personalmente. Como cuando estas acostumbrado a vivir en muchos espacios de consciencia llegas a comprender que la existencia, es simplemente un montón de espacios de consciencia y la muerte es uno más. El alma, ni ha nacido, ni va a morir, se integrara en su día, al Atman universal.
P- Piensas como los budistas, donde va el último pensamiento…, va la conciencia..,
R- La reencarnación, es una de las teorías más razonables. Vemos las cosas, la casualidad, en el universo no existe. Todo esta regido por unas leyes básicas fundamentales. A mí se me hace muy duro pensar que la posición de un ser humano, en un momento de la vida, es fruto de la casualidad. Todo es producto de algo. El hecho de nacer condicionado, ya te exige que tiene que haber un antes. Es trascendente.
FERNANDO DIEZ (PERFIL)
Fernando Diez nace en Madrid en 1944, aunque reside en un pequeño pueblo de La Alcarria desde hace veinticinco años. Como orientalista ha dirigido cursos en el Centro Internacional de Estudios Místicos de Ávila y ha fundado y dirigido anualmente el Congreso “Pastrana, música y arte mística” Habiendo publicado varios libros, desde “Historia de una búsqueda”, “Música, mística y trabajo interior” “El legado de la India” y “En busca de los limites” Siendo su último libro, “Física para místicos, mística para físicos” (Ellago ediciones) Y en su faceta musical como intérprete de Sitar a dado cientos de recitales en todo tipo de escenarios, así como cursos de verano en las Universidades de Salamanca, Huelva, Valladolid y en la Carlos III de Madrid, entre otras. Y como solista de Sitar ha editado cinco discos.