Cultura

La poesía fotográfica de David Quiroz

En esta oportunidad, y haciendo honor a la vocación, talento y sensibilidad de todos los Fotógrafos, presentamos a un gran chileno, David Quiroz.

De carácter tranquilo, mirada amable y llena de luz, personalidad introvertida al comienzo de este encuentro, con toda razón, ya que tiene dificultad para escuchar. Nuestro acuerdo para almorzar, y conocerle, es gracias a la gestión de su amigo Yoao Muñoz, quien está pendiente en todo momento de que don David esté cómodo y a gusto. Transcurre nuestro almuerzo en una “picada curicana” del país de Chile. Como el ruido del local es insalvable debido a su discapacidad auditiva, escribo mis preguntas que él va respondiendo con toda gentileza, espontaneidad y gran elocuencia.

El Fotógrafo David Quiroz leyendo una de las preguntas de nuestra entrevista.

Por ejemplo, nos va contando que esto de los “Homenajes”, a sus 72 años, lo tiene muy contento pero “sorprendido”, pues ya ha sido protagonista  de un Homenaje, en más de una ocasión, por su contribución a la memoria fotográfica de Curicó. Que comenzó a tomar fotografías de la ciudad en el año 1960, con ocasión de que vendía postales. Le gustaba que los edificios aparecieran bonitos, bien enfocados; para ello elegía tomar fotos en los días nublados para que aparecieran nubes detrás de los edificios.

Al contrario de lo que muchos creemos, de que don David Quiroz tomaba fotos con la cámara estenopeica, debido a que en alguna oportunidad realizó talleres de fotografía con esta cámara en la Escuela España, él nos aclara que comenzó tomando fotos con una cámara Kodak, doméstica, para aficionados. Al día de hoy toma fotos digitales. En cuanto a qué sistema es mejor para tomar fotografías, dice que cada sistema, antiguo o digital, tiene sus ventajas, pero es lapidario en afirmar que “el sistema digital terminó con la poesía de las fotografías…” Recuerda que había lápices Marchall para pintar fotografías, que en alguna oportunidad pintó fotos por ocio, nunca por negocio.

Sobre la evolución del Curicó de antaño al actual, refiere “…Me da pena el cambio de edificación, porque hay un cambio impactante; el Curicó de antes era muy bonito, por ejemplo, el campanario de la Iglesia Matriz terminaba en aguja, luego con el terremoto del año 1985, lo achataron, y con el terremoto del 27/F, lo dejaron más feo que antes, no hacen las construcciones de acuerdo al edificio. Ahí vemos el Escorial, un cortavientos, sin ventanas; el colegio Santo Tomás… y el Banco X…ahora parece un mausoleo, tiene fachada de cementerio, y el edificio de la farmacia principal, de cuatro pisos, que echaron abajo porque estaba muy malo, pero no estaba tan malo, y construyeron en su lugar un edificio de dos pisos, sin líneas artísticas, sin sentido… Curicó era una ciudad bonita”.

Concluye sobre la evolución de la arquitectura de Curicó, con tono decepcionado, de que no se haya considerado el estilo arquitectónico tan característico del Curicó fundacional, porque se instaló esta idea como concepto: la Modernidad.

En aquel Curicó antiguo, el de su memoria, recuerda su habitual local fotográfico, en el centro de la ciudad, local que permaneció en la misma dirección por 14 años, donde ofreció como producto “el retrato”, aunque siempre le dijeron que el retrato no era para vivir. Después de 14 años en la misma dirección, el local empezó a cambiar de lugar. Así fue como empezó a tomar fotos sociales, y fotografías a la Unidad Popular (U.P.) Luego de 52 años como Fotógrafo, llegó a contar con un importante archivo de negativos, 88 mil, aproximadamente, de los que ya ha donado una cantidad importante a la Universidad de Concepción.

“…Los otros fotógrafos me decían que era juntar basura, ellos los botaban o quemaban; el otro fotógrafo que también guardó sus negativos es Haroldo Herrera. Y retratos… a muchos… que hoy ya no están: a Juan Uribe, y a Oscar Ramírez, Director de la Prensa y escritor, a Jaime Bedós, a Quintín Arrigorriaga fundador de la “Arrocera el volcán”. Y recuerdo a un Diputado, Mario Fuenzalida, una personalidad muy relevante en Curicó. Debido a que hablaba mucho y nunca paraba le pusieron “el vitrola”, luego le pusieron de sobre nombre “el gallo Fuenzalida”, y era un clásico decir cuando teníamos un problema “Voy a ir a hablar con Mario Fuenzalida…”.

Recuerda hechos importantes que marcaron su vida. El primero, aparte de su propia historia, fue cuando salió presidente Salvador Allende, por la incertidumbre que se generó con las expropiaciones, él tuvo miedo de que le quitaran el local y se lo dieran a otro. En segundo lugar, lo marcó el golpe militar y las declaraciones de Augusto Pinochet, palabras que nunca olvidó y que hasta hoy tiene presentes: “…Los militares están entrenados para matar, no se metan con los militares, porque si se meten con los militares, de seguro los van a matar.” 

Y quien lo marcó pero en forma positiva fue Walt Disney; admiró mucho sus historietas, por eso hizo un curso de dibujo para aprender a dibujar.   Y sobre el hecho de su propia historia, el que presentimos, el cual prefiere no recordar y por el que guarda un silencio impresionante, es… la muerte de su esposa.

A pesar de sus logros profesionales, comenta que aún tiene inquietudes, por ejemplo siempre está con ganas de echar a andar el laboratorio fotográfico tradicional, y /o experimentar como hacer fotografías con la técnica de la sal, para ello necesita adquirir un libro que vio en internet, cuyo costo es de 52 euros; o experimentar la técnica de la fotografía sobre platino o bromuro de platino.

En cuanto a la influencia que tuvo su vida personal en su obra fotográfica, él expresa: “…Influencia, no sé. A mí me gustaba mi trabajo, era la realización de un hobby”.  Hace pausa, y continúa: “…Constituye un cambio grande, desde que falleció mi esposa, todo era un porqué, para qué… Tenía los niños chiquititos y sin la mamá. Empecé a participar en exposiciones, me gustaba participar, también el trabajo de estudio, y me sentía muy realizado con el trabajo de los retratos.”

Nos narra que su primera exposición fue en el año 1971, que entre tantas exposiciones recuerda la de la Universidad de Talca (UTAL), aquella en el año 2008, organizada por el Diario “La Prensa” de Curicó; y como aquella exposición, la de este sábado 29/09, en la que acaba de participar, organizada por el Comunicador Social Adolfo González, exposición, con carácter de Homenaje a su persona; y esa exposición que viene, antropológica, en planificación aún, gestión de la Universidad de Concepción.

Como la sincera y recíproca amistad que transmite tanto Don David como Yoao, perteneciendo ambos a tan diferentes generaciones, les pregunto que cómo se conocieron. Ambos piensan, y Yoao responde: “En una exposición, parece… Yo lo conocía de antes a Usted, lo ubicaba de antes de estudiar fotografía. Nos conocimos en una exposición suya o mía. Como en el 98 lo contacté, ¿se acuerda…? de la exposición sobre el siquiátrico, en el 2000.” ¿Y qué le preguntarías tú a don David? “¿Yo?” Me pregunta sorprendido su amigo Yoao, luego responde:

Los Fotógrafos Yoao Muñoz y David Quiroz, en «Plaza de las Artes Estación 108».

“…Más que preguntarle; hemos conversado harto, más que si fuera su alumno. No he recibido su instrucción, sino desde que lo conocí siempre quise aprender de él y recuperar su historia. Su tipo de fotos, es como una marca, un sello, marcó época.”

Por último, para cerrar  esta entrevista  preguntamos a don David ¿Cuál es su mensaje para las nuevas generaciones?

“…No sé qué decirles. Que admiro su capacidad para absorber la fotografía digital y los computadores, algo que yo no he logrado. Es otro mundo. Antes… existía la magia del cuarto oscuro, porque eso era, ver aparecer la imagen en el papel, verla… eso era la magia, y ese cuidado de hacer bien las cosas, era bonito; ahora no hay misterio, todo instantáneo. Cuando era el blanco y negro, queríamos colores; llegaron los colores, y  faltó  Poesía…”

Nuestros cordiales agradecimientos a: don David Quiroz, cuya obra fotográfica es un referente de la Idiosincrasia Maulina, e invaluable aporte a nuestra historia y a nuestra identidad; y   al Fotógrafo Yoao Muñoz, nuestro contacto, por esta enriquecedora instancia.

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.