Desde hace un tiempo, el agitado mundo de la literatura viene manteniendo un pulso comercial entre la denominada novela histórica y novela negra. Para fortuna del lector parece ser que el pulso lo está ganando la novela negra que goza de mejor salud. Esto de considerar fortuna que la novela histórica esté amainando pese a ser un viejo oficio literario, es alivio por la sencilla razón de que esta avalancha de historias noveladas dada la abundancia ofrece más gato que liebre. También en la novela policíaca se cuelan muchos gatos entre las liebres, pero no tantos. Y seguro que igualmente le llegará el freno, es decir las editoriales conscientes que la cantidad se lleva muy mal con la calidad en el mundo literario no debe de caer en el autoservicio de todo vale. Y un ejemplo es el proyecto de la veterana Alianza Editorial y su serie Negra que, con una identidad internacional de prestigio Alianza Negra inaugura su andadura con la novela Lumen, de la autora italoamericana Ben Pastor.
Esta obra tiene como eje central el asesinato de una monja en la Cracovia de 1939, Se trata de La madre Kazimierza, abadesa del convento, cuando la ocupación de Polonia por los ejércitos de Hitler. El suceso preocupa tanto a la Iglesia polaca como al alto mando alemán, que tiene conciencia de que la víctima es considerada una santa por el pueblo polaco por sus dones proféticos. Y para tan serio problema se encarga la misión de aclarar el misterioso suceso al capitán Martin Bora, del servicio de información militar alemán, Y por parte de la iglesia el padre John Malecki, un jesuita de Chicago de origen polaco para asumir tan delicada responsabilidad. Las muchas conversaciones que sostienen ambos personajes resultan ser un pulso entre odio y amistad, extraña empatía que llena la narración de muy rico contenido, pues los dos investigadores se sienten comprometidos por valores morales, sensibilidades y nivel cultural que llena la historia de amenidad y rigor.
Las preguntas que se formulan el sacerdote y el oficial militar alemán son coincidentes; ¿Quién o quienes han ejecutado a la víctima ¿Cuales son las razones que han podido existir? ¿Se puede sospechar que la venerada monja trabajaba para la resistencia polaca cada vez más activa, pese a la dureza criminal con la que le castigan los poderosos y satánicos miembros de la SS? Y en la andadura de tan espinoso como oscuro y enigmático camino se ven conducidos y obligados intentar aclarar el crimen ambos personajes a su manera, uno desde un discreción religiosa de buscar y encontrar la verdad desde limpios criterios de fe y políticos, que pueden producir incluso el temor de un enfrentamiento entre el Estado alemán y la Iglesia de Roma y su pura táctica diplomática que pretende mantener una cierta neutralidad en una Europa ocupada, que podría llegar a un enfrentamiento de altura con la jerarquía eclesiástica siempre previsora ante la política y los enigmas religiosos amparados por la fe popular.
Por otra parte el capitán Bora que lucha consigo mismo en su interior entre el sentido del deber de oficial del poderoso ejército alemán comprometido con su propio pundonor de sólidas convicciones éticas, que choca hasta llegar a duros enfrentamientos con la bestialidad nazi. Pues se vive frente a la brutalidad de los cuerpos especiales de unos jefes que hábilmente le sirven al narrador para ridiculizar el nazismo militarizado y el disciplinado capitán amante de la música – su padre fue un famoso director de orquesta – que interpreta el mismo al piano, hablando varios idiomas y aficionado a la filosofía. Las diferencias no pueden ser más acusadas y enfrentadas aunque se intenten guardar las formas.
La interesante escritora Ben Pastor ha sabido crear con acierto unos personajes con personalidad propia, unos con rigor y compromiso, otros por sus miserias, descripciones y comportamientos que nos van mostrando la realidad de los intereses de los que luchan por la libertad y la razón y quienes toda su avaricia y maldad es el poder absoluto. Lo que ofrece al lector poder palpar por si mismo las contradicciones que surgen tanto en la Iglesia como en la política por la razón y la moral. Una historia llena de tensión narrativa que atrapa.